Capítulo 11

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Una nueva amistad.

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Había abierto los ojos, se sentó en la cama, observando que estaba en su nuevo hogar, miro a su lado, dándose cuando de que la pecosa no estaba.
La anterior noche le propuso vivir con ella, termino aceptando... después de eso, se fueron a comer, ya que no había nada en la casa.
Ahora se pregunta, ¿dónde está Ellie?, cuando volvieron de comer, María les había dado mantas y algunas cosas.

Y al regresar, se habían ido a dormir...

En ese momento la pecosa entro por la puerta, y al darse cuenta de que Molly estaba despierta, simplemente la saludo.

—Buen día rubia.— dijo entrando y cerrando la puerta.

—Buen día Ellie.

—¿Como amaneciste?.

—Muy bien, no dormía tan bien en años.— dijo mientras se estiraba —¿Donde estabas?.— pregunto curiosa.

—En casa de María y Tommy, ayer me habían dicho que pase por su casa para hablar...

—Ya veo.— dijo luego bostezar —Hmmm, estabas tan cómoda Ellie...— dijo volviendo a cerrar los ojos con pereza.

—No empieces Molly..— aviso la pecosa, sintiendo su cara arder.

—Y ahora que di-

No termino de hablar por qué sintió olor a comida, y parece que huele muy delicioso.

—¿De dónde.. es ese olor?.— pregunto, pasando saliva con dificultad, ya que le dió apetito.

—De eso también quería hablarte, María me dió unos Sandwiches de carne, y te traje algunos...— explico, sacando algo envuelto.

Enseguida a la rubia le rugió el estómago, con rapidez, gateo hasta ella, sentándose a su lado.

—¡Dame!.— exigió estirando sus dos manos.

—¿Que se dice?.— pregunto firme la pecosa.

—Por.. favor?...

—Que educada...— dijo rodando los ojos, dándole la comida sin más.

La rubia quitó el envoltorio y enseguida empezó a devorar los Sandwiches, Ellie solo nego con la cabeza mientras la miraba, sentándose en la cama.

La rubia en lo que comía, observo a la pecosa que miraba para otro lado, esperándola, y no se le ocurrió otra cosa que molestarla, así que con cautela, pozo una de sus piernas sobre la suyas.

La pecosa se sobresalto, mirando la pierna de la rubia y luego a está.

La rubia solo la miro y le guiño el ojo, mientras daba otro bocado.

Ellie solo trago saliva con dificultad, recordando lo de anoche.

.Flashback.

—Estoy llenisima.— dijo la rubia entrando a la casa, llendo directamente a tomar algo de ropa.

—Si comes como una condenada, como no vas a estarlo..— dijo Ellie rodando los ojos, mientras cerraba la puerta.

—Si si, lo que tú digas señorita refinada.— dijo de manera burlona, entrando al baño para cambiarse.

—Esa mocosa...— dijo resoplando, también tomando algo de ropa.

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