Cielo Azul

Capítulo 13

Me encontraba en el campo de entrenamiento, observando los blancos de tiro, algunos más alejados que otros.

Hoy la rubia se había levantado con dolor de cabeza, pero supuso que se le pasaría al rato.

...

¿Verdad?

Estaba esperando a Ellie, había dicho que iba a buscar un rifle para enseñarme a disparar, justo en el almacén donde guardan las armas.

...y ya estaba tardando un poco.

Una semana había pasado desde que ella le contó como era su vida.

Y bueno.. no se volvió a tocar el tema, en todos estos días se dedicaron a limpiar y acomodar su nuevo hogar, ya que habían cosas que debían reemplazarse por qué nadie lo habitaba.

Ayer terminaron todo, y cuando estaban descansando.. la pecosa le dijo a la rubia que mañana le iba a enseñar a disparar un arma.

Y aquí estamos...

La estaba esperando, pero ahora que lo piensa.. cuánto tiempo paso-

—Hola enana.— saludo una voz a sus espaldas.

Molly dió un pequeño brinco, para luego darse la vuelta y ver a la persona.

—Amber...— pronuncio la mas baja un poco sorprendida por la presencia de la chica.

—Cuanto tiempo rubiales.— dijo con una sonrisa la morocha.

—Lo mismo digo, no esperaba verte aquí.— dijo dándole un pequeño abrazo en forma de saludo.

—Fíjate que pensaba lo mismo...no pareces de las que les gusta usar un arma.

—Si.. sobre eso, me van a enseñar a usar una.

—Vaya.. mírala tu nada más, la enana quiere aprender a disparar.— dijo en forma de burla.

—Cállate..— respondió cruzándose de brazos, pero aún así tenía una pequeña sonrisa mientras negaba con la cabeza —Cambiando de tema.., ¿que haces aquí?.- pregunto curiosa.

—Oh.. verás, está es mi área, me encargo del armamento, o una de las personas que se encarga.— respondió con simpleza, mirando el campo de entrenamiento.

—Entonces también sabes disparar?.

—Pues claro.— respondió de manera obvia —Hasta voy al patrullaje fuera de los muros.. no es por alardear, pero como bien te habrás dado cuenta, tengo mi herida de "batalla".— dijo señalando su parche con una sonrisa.

—¿Como fue que lo... perdiste?.— pregunto la rubia curiosa, refiriéndose al ojo.

—En simples palabras, un cazador, pero descuida, el tipo quedó peor.— dijo tratando de sonar divertida, aún que falló en el intento, sacudiendo la mano sin darle importancia —Tal vez uno de estos días te cuente cómo sucedió, pero ya basta de hablar de mi, ¡ahora cuentame de ti!, ¿que has estado haciendo mujer!?.— pregunto con entusiasmo.

La rubia soltó una pequeña risa sonora ante el comportamiento de la chica, respondiendo.

—Bueno, estuve-

—¿Quién eres tú?.— Pregunto una voz conocida a espaldas de Molly.

La rubia se dió la vuelta, encontrándose con Ellie, con una mirada afilada, que poco a poco se iba tornando sería, sosteniendo el rifle de caza con la mano derecha.

—¡Que hay!.— saludo la morocha, levantando su mano, con una mirada amistosa.

La pecosa no respondió, solo se le quedó viendo fijamente, la morocha hacia lo mismo, sosteniendole la mirada.