Hayami se levantó de la cama para dirigirse a la sala. Debía desayunar y buscar a Kakashi o a Yuki-sensei. Aún no quería juntarse con ellos, pero si no lo hacía le daría la razón a yuki-sensei. No era que no deseaba darle la razón, pero él le había preguntado varias veces si de verdad quería hablar con ella. Hasta le había advertido de que posiblemente no iba a ser nada lindo lo que escucharía por parte de Hikari. Y tenía razón.
Desayuno, ignorando los comentarios de su madre sobre "dormir saludablemente", y partió a en la búsqueda de sus senséis. No debía de tardar en encontrarlos, por lo que ella sabía Kakashi-sensei andaba entrenando a Sasuke y Yuki... bueno no sabía lo que su sensei hacía, pero lo encontraría.
Primero decidió ir a la casa de Hikari, pero nadie le respondió. Quizás Kakashi-sensei ya se encontraba entrenando con Sasuke, ¿estaría bien que ella interrumpiera el entrenamiento? Era un tema serio y de suma importancia para Kakashi-sensei, él no pondría ninguna objeción...pero Sasuke. El era tan malhumorado que pondría mil objeciones para que ella no hablara con Kakashi-sensei . Pero debía hacerlo.
"Será mejor ir. Kakashi-sensei hará entender a Sasuke que es algo importante."
Pensó Hayami empezando a saltar por los tejados de las casas.
Después de una ardua búsqueda, Hayami por fin encontró a Kakashi y a Sasuke en el campo de entrenamiento n° 7. Ella se dejó caer a pocos pasos de Kakashi, el cual se dio cuenta de su presencia de inmediato. Sasuke también se percató que se encontraba en el lugar poco después. El frunciendo el ceño inmediatamente. Al parecer ya debía suponer lo que iba a pasar a continuación.
Kakashi-sensei le sonrió en cuanto se acercó a él.
—Ah, Sasuke, vamos a dejar el entrenamiento aquí por hoy. Hiciste un gran avance, así que seguiremos mañana. — Hablo Kakashi dirigiéndose al susodicho. Al parecer no tuvo que decirle porque estaba ahí, él debía suponerlo por sí mismo.
— Pero recién hemos comenzado.
—... Tengo asuntos importantes que atender. Lo dejaremos aquí por hoy. — Comentó Kakashi-sensei empezando a caminar hacia la salida del campo. Hayami lo siguió inmediatamente, dejando atrás a Sasuke. Creía que iba a ser más difícil hacer que él dejara de quejarse. — Te invito un té.
Hayami asintió.
Ambos se encontraban en una de las tantas casitas de té de Konoha, esperando a que llegara su pedido.
Hayami se preguntó si era buen momento para decir todo o debía esperar las tazas de té. Quizás Kakashi-sensei quería esperar un poco para escuchar lo que ella tenía que decir. De todas formas, no dijo nada, era mejor que él diera la señal para empezar esa plática.
"... Como desearía que Yuki-sensei estuviera aquí"
Pensó Hayami recordando a su eufórico maestro. Quizás él la inundará de preguntas, pero sabia rellenar momentos incomodos y alegrar un poco el ambiente. Podría decirse que en ese momento se arrepentia de no haber ido a hablar con Yuki en primer lugar.
El pedido no tardo en llegar. El mesero dejo los tés y se alejó de la mesa. Ambos se quedaron solos nuevamente, junto con el ruido de las personas de fondo.
Kakashi miro su té, pensando de si eso realmente calmaría el malestar en su estómago. Sabía que se debía a la ansiedad que le generaba lo que podría decirle Hayami. Había tenido que esperar un día entero. Un día en donde se había echo mil ideas de lo que le podría decir, una peor que la otra. Lo único que él esperaba era tener suficiente información para entender a su hija y así sacarle esa loca idea de la cabeza

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Yoake no Hikari
FanfictionNadie supo de dónde vino. Una noche cualquiera, una bebé apareció frente a la puerta de Hatake Kakashi. No había señales de lucha, ni pistas, ni un solo ruido. Solo una niña pequeña y tranquila. Por orden del Hokage -y quizás por una herida que aún...