El viaje que lo cambió todo | Inazuma eleven

Capitulo 15

Al día siguiente nos dejaron la mañana libre para hacer lo que quisiéramos, yo pensaba pasar la mañana con Gabi, pero se ve que este no pensó lo mismo.

-Gabi, ¿Vienes conmigo a pasar la mañana?- le pregunté alegremente.

-No, lo siento iba a ir con Aitor, luego nos vemos- me dijo mientras se marchaba.

No me lo podía creer, me acababa de dejar ahí con la palabra en la boca y se había marchado con Aitor. Yo pasé la mañana con los chicos pero no pude evitar pensar en Gabi y Aitor, ¿Porque estarán tan juntos de repente, si hasta ahora se llevaban como el perro y el gato? Entonces llegó la hora del entreno.

-Chicos, vamos a hacer unos ejercicios de pases- comenzó diciendo el señor Sharp- asi que poneos por parejas.

Mire a Gabi, pero ya vi que se había puesto con Aitor. Ya me estaba comenzando a molestar que pasara tanto rato con Aitor. Así que lo deje en paz, y me puse con Víctor, el cual noto mi actitud en el segundo uno en el que me dirigí a él.

-A ver ¿que te pasa?- pregunto nada más verme.

Yo no quise responder, pero se ve que ya era suficiente para este ya que dedujo la respuesta en aquel instante.

-¿Es por Gabi verdad? Estás molesto de que pase tanto rato con Aitor.- la verdad es que me sorprendió su rápida deducción, por lo que yo asentí.

-Tú tranquilo, no le des más vueltas, que seguro que no es por nada en especial.- concluyó mientras comenzábamos a realizar el ejercicio.

La verdad lo intenté, intenté no pensar más en ello, pero por más que intentaba centrarme, más pensaba en ello. Al final acabó el entreno y no lo logré sacar de mi cabeza.

-Muy bien chicos, ahora daros una ducha y bajad a cenar- dijo Axel Blaze.

Me encantan las duchas, para mi es como un momento de calma, sentir el agua por tu piel, salir sintiéndote renovado. Pocas cosas hay mejores que una buena ducha en mi opinión y mucho más si es caliente.

Cuando fuimos a la cena, otra vez volvía a estar Aitor con Gabi, sentados en la mesa hablando, aunque este me había guardado un sitio, pase de largo y me senté al lado de Ryoma, lo cual cayó en vista de todos, pero no quisieron preguntar, lo cual agradecía rotundamente.

Se ve que a Gabi esto le molesto, ya que no paro de mirarme en toda la cena, pero yo no le diriji ni una mirada en toda esta. Cuando todos terminamos de cenar intenté ir directamente a mi habitación, pero noté como alguien me agarraba del brazo. Me giré para ver quien era la persona que intentaba evitar que fuera a mi cuarto, la verdad no entiendo porque me sorprendió, claro que sabía quién era antes de girarme, pero igualmente al darme la vuelta lo vi, ahí estaba, era Gabi.