Adrenalina || Pablo Gavi

capítulo 16 - el cumpleaños

Gavi

-¿Tenemos que ir a su cumpleaños?- le pregunté a Aitana con cara de asco.

-Si, te recuerdo que es nuestro amigo.- respondió poniéndose sus zapatos.

-Corrijo, es tu amigo.- dije haciendo énfasis en "tu amigo". -A mi me tiene un asco que no puede conmigo.-

-¿Y qué? Desde cuando te importa lo que diga Armenteros.- ella tiene razón, a mi que me importa lo que diga ese.

Si yo sé que soy mejor.

-Cierto, al final soy yo el que está contigo y no él.- dije y ella asintió. -Pero como se te acerque hoy te juro que me lio a hostias.-

-Pablito relájate.- habló mirándome. -Solo vamos a ir a una cena y luego ya hacemos lo que queramos.-

-¿Lo que yo quiera?- pregunte con varias ideas pasando por la cabeza.

-Te recuerdo que hoy tuviste un partido, deberías de estar cansado.- ella me revolvió el pelo con su mano.

-Siempre tengo reservas de energía.- dije sonriendo como un angelito. -A demás, me puedo tomar un redbull.-

-Anda, cálzate ya que vamos tarde.- me mandó, yo solo bufé.

Llamé a un taxi para que nos viniese a recoger. Aitana va guapísima, una parte de mi está perdido pensando en ella y la otra parte está pensando en cómo voy a reventar a Armenteros cuando diga algún comentario sobre Aitana.

-Vamos Pablito, que ya está el taxi.- dijo sacándome de mis pensamientos.

Me levanté del sofá, agarré su mano y bajamos juntos.

-¿No llevas cazadora?- pregunté al verla.

-No.- dijo sin importancia. -Si tengo frío ya le cojo la sudadera a alguien que conozco.- ella me guiño un ojo.

-¿A quién se la vas a coger?¿A Armenteros?- pregunté para picarla.

-A este paso si.- ella rodó los ojos.

-Anda no te piques.- dije abrazándola por la cintura.

-Es que eres un pesado a veces.- se alejó de mí para ir al taxi.

El camino al restaurante fue en silencio. Aitana ni me dirigió la mirada, en cambio yo estuve todo el rato mirándola.

¿Cómo se puede ser tan guapa?

Al llegar al restaurante fuimos directos al reservado donde estaban nuestros amigos.

-Hombre Tati.- saludó Pedri acercándose para abrazarla. -Y mira aquí esta el otro.- dijo refiriéndose a mi.

-Qué gracioso estás hoy.- dije devolviéndole el apretón de manos.

Miré hacia donde estaba Aitana pero no la vi, busqué con la mirada y la vi abrazando a Armenteros.

Una ola de celos me recorrió el cuerpo de repente. Fui directo hacia allí para felicitar al queridísimo cumpleañero y de paso separarle de mí Aitana.

-Felicidades.- mascullé mientras le miraba con cara de asco.

-Gracias tío.- habló el rubio devolviéndome la mirada y separándose de Aitana.

-Le estaba contando a Armenteros que hoy jugaste.- dijo emocionada acercándose a mi.

-¿Ah sí?¿Ganasteis?- pregunto sin interés.

-Si, pero no fue un partido de otro mundo.- respondí sin más.

-¿Marcaste?- cuestionó con aires de superioridad.