capítulo 18 - vaya chica

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Gavi

-Y el premio para la persona mas tonta e idiota del universo es para...- canturreó Pedri. -Pablo Gavi.- grito y todos los chicos del vestuario aplaudieron.

-De verdad, sois unos imbéciles.- hablé poniéndome mi camiseta.

-En todo caso el imbécil eres tú.- contraatacó Ansu.

-Eso es cierto, a nadie se le ocurre dejar pasar a una ex novia que sigue pillada por ti a tu casa.- dijo Araujo.

-Ay niño.- suspiró Jordi. -Aún te queda mucho por aprender.-

-Ni que fueras un sabio de la vida.- le dije rodando los ojos. -Que tienes treinta y tres años, no noventa y dos.-

-Ya, pero como tu tienes dieciocho años me considero más sabio que tú.- habló con tono de superioridad.

-¿Has probado a llamarla?- preguntó Ferrán.

-Si.- respondí obvio. -No me coge el teléfono ni me responde a los mensajes.- dije desanimado.

Me sentía fatal, no había podido explicarle lo que había pasado. Nunca me sentí tan mal como me estoy sintiendo ahora mismo, que Aitana piense que soy una mala persona cuando muchas veces deje de pensar en mi mismo por ella me esta matando por dentro, no me malinterpretes, no me arrepiento de haberlo hecho.

-Espero que sepas que Sira te ha cogido un asco enorme.- habló Ferrán de nuevo.

-Normal.- murmuró Busquets, al cual le había contado todo en el entrenamiento.

-Ya habló el otro sabio.- dije.

Para que mentir, ahora solo tenía ganas de irme a casa y no hablarle a nadie.

-Voy a ir a verla ahora.- hablé cabizbajo pensando en cómo le iba a explicar todo.

-Venga va, seguro que te entiende.- me animó Ansu dándome unas palmaditas en la espalda.

-Cuando lo arregléis nos la presentas eh.- dijo Eric sentándose en el banquillo del vestuario.

-Eso, queremos conocer a la afortunada sobre la que nos llevas hablando cuatro meses seguidos.- dijo Araujo guiñándome un ojo.

-Anda, dejaros de tonterías que tengo que ir a hablar con ella.- dije levantándome y cogiendo mi mochila. -Adiós.- me despedí.

-Suerte.- me deseó Balde, el cual acababa de salir de la ducha.

Los demás se despidieron y me desearon suerte. Estaba nerviosísimo.

Llegué a su apartamento y llamé al telefonillo.

-¿Gavi?¿Qué haces aquí?- preguntó Irina a través del interfono.

-¿Que voy a hacer aquí? Ábreme que quiero hablar con Aitana.- le dije obvio.

-Uy... tu sube que hay una mala noticia que es mejor que te de en persona.- habló desconfiada.

Subí preocupado por lo que me había dicho de una mala noticia ¿A qué se refería?

-Pasa, pasa, va a ser mejor que te sientes antes de que te informemos de esto.- Fui al salón de la casa inquieto, allí estaban Sira y Marta sentadas en un sofá.

-Hombre, hola Sira.- le saludé, ella me miró y me ignoró. -A ver, tengo una explicación.-

-Seguro.- masculló mirándome mal.

-Lo prometo.- dije sentándome. -Sira, tu conoces a Claudia.-

-¿Quién es Claudia?- preguntó Irina.

Adrenalina || Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora