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Me sentí feliz, como nunca antes al enterarme que ya no estaba en esa sociedad o lo que fuera. Me acompañó a la oficina y le di mi llave del departamento, nos dimos un beso y entré al edificio. Arreglé todo lo necesario para la junta que tendríamos con el Sr. Jackson a las tres treinta de la tarde. Scott se fue a las siete y me dijo que ya me podía ir yo también, así que apagué la computadora, tomé mi bolso y salí de la oficina. Aidan me estaba esperando afuera del edificio, me recibió con un beso y nos marchamos.

Cuando llegamos al departamento me llevé una grata sorpresa, la mesa estaba puesta para dos personas y en el centro había un hermoso arreglo de alcatraces, lo miré boquiabierta y lo abracé efusivamente luego de darle un beso.

—Aidan, ¿Cómo sabías que los alcatraces son mis flores preferidas? —

—Sé más cosas de ti de las que te imaginas. — Respondió guiñándome un ojo.

—¿Ah sí? ¿Y cómo puede ser eso? —

—Es un secreto, siéntate que la cena ya está lista. —

—¿Te ayudo en algo? —

—No corazón, tú vienes de trabajar, debes estar cansada, aunque espero que no tanto para el postre. — Dijo en tono sensual.

Me sirvió una copa de vino y fue a la cocina, regresó con dos bandejas de sushi y en la otra mano una bandeja con ensalada, me sirvió en un plato el sushi y en el otro la ensalada y después se sirvió él, puso algo de música y se sentó frente a mí. Cenamos tranquilamente y me comentó que Presley le había llamado para confirmar mi asistencia a su boda y él le aseguró que por ningún motivo faltaría.

—Por cierto, corazón, ¿Puedes permiso para faltar ese viernes? Por favor, me gustaría llegar al ensayo, ¿Sabes? Soy el padrino. —

—¿Enserio? No tenía idea, voy a hablar con Scott, si no se puede, llego el sábado yo sola y así no te pierdes el ensayo. —

—De ninguna manera, tienes que llegar conmigo. —

—Cierto, que soy tu "novia" — Exclamé en tono gracioso. — No se vería bien si llego sola. —

—Exacto, daría la impresión que estamos disgustados. —

—Aidan...hablando enserio... ¿Por qué le dijiste a esa chica que soy tu novia? —

—¿No lo eres? —

—¿Lo soy? —

—¿No quieres serlo? —

—¿Lo quieres tú? —

—¿Vas a seguir respondiéndome con preguntas? —

—¿Vas a seguir evadiéndolas? —

—¿Vas a continuar evadiéndolas tú? —

—Aidan, enserio, esto no es ningún juego. — Dije un tanto seria.

—Para mí tampoco lo es. — Dio un suspiro. — Sé que no te lo he preguntado formalmente, pero así te considero. —

—No tienes que preguntarlo, las palabras se las lleva el viento, lo que cuentan son los hechos, sólo me tomó por sorpresa escuchártelo decir... ¿Me presentarás de igual forma con tu familia? — Pregunté con cierto temor.

—Por supuesto, ¿No te agrada la idea? —

—No es eso. —

—¿Qué es lo que en realidad te preocupa, t/n? —

—Yo no soy de tu clase, Aidan, tú has estudiado en las mejores escuelas privadas, yo siempre en públicas y si pude costearme la carrera fue porque trabajaba. —

𝐌𝐢 𝐀𝐫𝐝𝐢𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐓𝐞𝐧𝐭𝐚𝐜𝐢𝐚́𝐧 [ᎀᎅᎀ᎘᎛ᎀᎄɪᎏ́Ɏ] (𝓐.𝓖.) [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora