Alex, el asesino joven © (COMPLETO)

Capítulo 11: Lo qué menos se esperaba

Sabrina se había ido, mientras que Cole y yo nos quedamos en el bosque pensando que íbamos a ser con el cuerpo del violador.

—Ahora ¿Qué haremos?— le pregunto a Cole, yo que quería tener mi semana libre tranquila, y ya tengo dos muertos encima en menos de 3 días.

—Yo tengo ganas de dejarlo aquí.

—No me parece buena idea.

—Nadie va a saber que fuimos nosotros, la única persona que nos vio, va a callar de por vida en agradecimiento de que la salvamos.

—¿Será?— estaba dudando de si dejarlo ahí o no.

—Sí, dejémoslo aquí, nadie se preocupará por una rata inmunda como él, además de aquí a la noche se lo tuve que haber devorado los lobos.

—Sí, esos lobos devoran todo a su paso— le digo a Cole, recordando de cuando le di el cuerpo de Hugo a los lobos para que se lo comieran.

—¿Nos vamos?, Tal vez no cazamos a un ciervo, pero si a un depredador sexual— me dice Cole.

—Sí, ya vámonos, estamos muy lejos de la entrada del bosque.

Empezamos a caminar con los rifles en la mano, pasando por tantos árboles idénticos, me sorprendió que Cole andaba muy callado, el siempre está hablando.

—Ah Sabrina, ¡Qué bonita es!, ¿No lo crees Alex?— me pregunta Cole.

—Sí, es muy bonita— admito.

—La verdad entiendo al violador, hasta mí me dió ganas de follarla ahí mismo— dice Cole.

—Por más bonita que es, eso no es ningún motivo para intentar abusar sexualmente de una joven, además ¿Tú no eras gay?.

—Soy bisexual, te recuerdo, ¿Tú no tenías novia?.

—Sí tengo, ¿Por qué sacas el tema de mi novia?, ¿Lo dices por Sabrina?.

—Sí, por ella, para solo haberla salvado, demostraste interés por esa chica.

—En ningún momento, dije que me interesaba.

—Le estabas mirando los senos.

—¡Por supuesto que no!, Estaba tan enfocado en ayudarla, que no me fijé en eso— le digo a Cole, que me está haciendo enojar por estar insinuando que le soy infiel a Hillary.

—Le fuiste infiel en pensamiento a tu novia, Alex, no te atrevas a negarlo— dice Cole.

—Podemos dejar de hablar de Sabrina ¿Sí?.

—Esta bién— Cole se queda callado por un momento, mientras ya casi llegábamos a la entrada del bosque.

—Ni creas que esa chica te va a devolver tu suéter, ni sabes en dónde vive, ni ella sabrá localizarte— me dice Cole, mientras nos dirigimos a su Ferrari.

—No me importa, por mí se puede quedar con mi suéter.

—Estas aguantando frío como un idiota— me dice Cole, señalando de que solo tengo puesto una franelilla blanca.

Nos subimos a su Ferrari y nos vamos del bosque.

**

Habían pasado 2 días, después que Cole me dejara en mi casa, me decidí a descansar y relajar mi mente, ya que cada vez que salía, mataba a alguien sin planearlo.

Quise disfrutar en la fiesta de Reid, maté a alguien.

Quise salir de cacería, me involucre en un asesinato.

Mis intentos de disfrutar, han sido fallidos, así que fui a mi lugar feliz, estar con Hillary.

Estaba fuera de su casa, había llamado un par de veces, así que estaba esperando que Hillary saliera, tenía puesto un suéter rojo, ya que durante esos días había demasiado frío en Denixford, y había dado por perdido el otro suéter.