Los Amigos No Se Miran Así

Capítulo 3

La noche iba de maravilla, el amigo de Shawn ya había venido y los tres nos la pasabamos hablando. Por cierto, su nombre era Bruce.

Estábamos junto a Shawn sentados en un sillón uno al lado del otro mientras Bruce estaba parado enfrente nuestro contando como había hecho para quedar en el grupo principal de su equipo de baloncesto.

—Te dije que vengas conmigo. Deberías olvidarte lo que paso la ultima vez y probar de nuevo. —Le insistió a Shawn que lo miraba con cara seria y negaba.—

—No tengo muchas ganas.—Contestó sin más—

—¿También haces baloncesto?—Pregunté intrigada y con una sonrisa.

La verdad tenía la altura y su físico también lo favorecía para el deporte, creía que debía ser bueno.

Él asintió y se encogió de hombros pero le siguió contestando a Bruce— Estoy bien con mi equipo, si me rechazaron una vez no creo que me den una segunda oportunidad.

—Ni siquiera te dejaron probarte— Le dijo bruce con el ceño fruncido por la terquedad de su amigo.

Note como el chico a mi lado volvió a restarle importancia.

—En un rato debo irme, la carrera va a empezar y quiero verla.— Murmuró él mientras miraba su teléfono cambiando de tema—

Eso me hizo poner mala cara, la estaba pasando bien con ellos dos, no quería tener que perder eso porque sino la noche se tornaria aburrida

—¿Porqué quieres irte? quedate. La estamos pasando bien.

Insistí un poco. Mientras por dentro rezaba que me haga caso.

—Es que hay una carrera de Fórmula 1 y no me la quiero perder.

Cuando menciono eso, me emocione e hice la pregunta más tonta que le podría hacer a alguien que ve carreras de autos.

—Entonces si te gusta eso, ¿te gusta rápidos y furiosos?—Pregunté sonriendo emocionada—

Era mi saga de películas favoritas, podríamos ser muy buenos amigos si teníamos algo asi en común.

El me miró y creo que no pudo evitar reírse porque una carcajada le salió de repente y nego.

Al menos lo hice reir... ¿Verdad?

—No, no me gusta. ¿A ti, sí?— Inquirió con una sonrisa burlona—

Me sonroje un poco, había sido muy tonta al preguntar eso pero ya no había vuelta atrás, la vergüenza ya la había pasado.

—Pues si, a mi si me gusta.

Trate se decir lo más orgullosa posible pero mis mejillas no decían lo mismo de aquella seguridad.

—Entonces a mi también.—Murmuró levantando sus hombros y dedicándome una sonrisa—

Un momento... ¿Me estaba coqueteando?

Mis mejillas se tiñeron de rojo aunque por la poca luz no se llegaba a ver y lo agradecía de verdad.

No estaba muy acostumbrada a los coqueteos, de hecho nunca había dado un beso, tenido novio o al menos alguien que se preocupase por mí, así que ante la mínima sospecha de que alguien coqueteaba conmigo ya era suficiente para ponerme peor que un tomate.

Me quedé en silencio unos segundos hasta que llegaron las chicas de afuera y ofrecieron jugar a un nuevo juego de cartas. Junto con los chicos nos unimos.

Shawn se sentó a mi lado y mientras jugábamos nos tirabamos alguna que otras miradas.

Sí definitivamente me esta coqueteando y yo claro, no quiero quedarme atrás.