Capítulo 25: La familia de Julia

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Annie sale de la consulta revisando los nombres en su teléfono, había dejado de escuchar las voces de los demás desde que la pastilla hizo un poco de efecto, a duras penas Dévora hacía alguna aparición

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Annie sale de la consulta revisando los nombres en su teléfono, había dejado de escuchar las voces de los demás desde que la pastilla hizo un poco de efecto, a duras penas Dévora hacía alguna aparición.

"¿Por qué Héctor?", piensa Annie.

"Debe ser por la hermana, tranquila", siente que hubiera sido la respuesta de Dévora, pero se lo dice ella misma, para no entrar en paranoia.

Disfruta un poco de caminar en el proceso de volver a casa, no siente la misma presión de hace un rato. Al llegar se da una ducha y deja caer en su cama para descansar al lado de Pelusa. En la madrugada tocaría trabajo para su compañera de cuerpo. Coloca la alarma para que suene a las once de la noche.

—Espero que te diviertas en el trabajo, recuerda hablar con Susana —le dice a su reflejo antes de cerrar los ojos para dormir.

El despertador hace su trabajo y ella se levanta de la cama estirando su cuerpo como si fuera un gato, justo como Pelusa

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El despertador hace su trabajo y ella se levanta de la cama estirando su cuerpo como si fuera un gato, justo como Pelusa.

—Por fin lo tengo de nuevo sin preocupaciones —dice la chica y va al baño a tratar cada detalle de su rostro antes de empezar con los cambios de imagen, coloca los lentes, la peluca y busca su sección de ropa del armario.

"Perfecta como siempre", piensa ante el espejo luego de hallarse lista para marcharse de la casa.

Cuando está en el pasillo ve las luces del apartamento del vecino encendidas y deja una ligera sonrisa.

—¿Debería ayudarla? Sería fácil. —Avanza dejando un sonido bajo al andar sobre los altos tacones en el corredor.

Camina por las oscuras calles de Varenchya hasta su lugar de trabajo mientras saca de su bolso un cigarrillo y le da varias caladas. La nube de humo se forma sobre su cabeza por donde pasaba. Hay pocas personas en los alrededores, sobre todo por el conocimiento popular sobre el asesino serial. Sin embargo, a Dévora no le importa esto ahora, se dedica a avanzar a su lugar de trabajo.

Llega por la puerta trasera a los bastidores y ve a todas allí, pero no está Susana, esto se le hace muy extraño, siempre tuvieron turnos juntas.

Se acerca a una de las otras chicas y le pregunta—. ¿Por qué Susana no vino hoy?

Reflejo RojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora