DESPERTAR (MERAKI I)

CAPÍTULO 13

AQUÍ LA SEGUNDA PARTE DEL MINI MARATÓN. DISFRUTAD DE EL CAPITULO DE REGALO!

NOS VEMOS EL JUEVES CON EL CAPÍTULO 14!

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Era más de medianoche. Lucy y yo habíamos comenzado a ver Gossip Girl al volver de cenar porque, según ella, no podíamos ser Blair y Serena si no tenía ni idea de quienes eran. Nos habíamos enganchado tanto a la serie, que nos habíamos visto cuatro capítulos seguidos y si no hubiera sido porque no s moríamos de sueño, probablemente hubiéramos visto el quinto. Era la primera serie que veía en mi vida y no porque en el orfanato no hubiera televisión, sino porque la única que había, se la había agenciado Chuck para poder ver los partidos de fútbol en su despacho, sin que nadie le molestara. Si la asociación que nos la había donado se hubiera enterado, se la habrían arrancado de las manos.

Todo el sueño y todo el cansancio que había ido arrastrando a lo largo del día desaparecieron en cuanto mi cuerpo entró en contacto con la cama y, por más que traté de conciliar el sueño no fui incapaz de dormir. Di tantas vueltas en la cama, que podría haberme mareado y observé el techo durante tanto rato, que comencé a identificar formas en él, como siempre hacía cuando observaba las nubes. Dos horas después, cuando me di cuenta de que aquella iba a ser una larga noche de insomnio, me di por vencida y comencé a juguetear con el móvil.

Los chicos me habían descubierto aquella tarde tras acabar las clases, el extraño mundo de Instagram. Según ellos, era inaceptable que ni siquiera conociera la aplicación y me habían ayudado a abrirme una cuenta. Dos minutos después colgaron un selfie en él se nos veía a los cuatro juntos. A la izquierda Tyler sacando la lengua y bizqueando, a su lado estaba Lucy dándole un beso en la mejilla. Junto a ella estaba yo, sonriendo como nunca antes lo había hecho. Mis ojos y mi piel parecían resplandecer de felicidad. A mi lado, Daniel también sonreía a la cámara.

Nada más colgar la imagen, un montón de notificaciones habían empezado a llegar a mi teléfono. Muchos estudiantes que ni siquiera conocía, empezaron a seguirme y a comentarme la única foto que había en mi perfil. Algunos comentaban cosas buena, sobre todo, los que conocían a mis amigos, pero para los alumnos de la élite, mi perfil había sido su dosis de entretenimiento diario y se habían dedicado a sugerirme volviera al vertedero del que me había escapado. Pero si creían que cuatro comentarios malintencionados me iban a hundir, estaban muy equivocados. Solo había una notificación que, por mucho que me molestara admitirlo, había conseguido acelerarme el corazón al verla y que me había puesto tan nerviosa que me había tenido que refugiar en mi habitación durante un momento para comprobar que no estaba teniendo alucinaciones. De hecho, si lo pensaba de nuevo, mis latidos volvían a acelerarse.

La notificación era la siguiente: "JohansonAlex ha dado me gusta a tu foto"

"¿Qué?" había pensado. Rápidamente me había puesto a buscar si había comenzado a seguirme, pero una extraña sensación de decepción me recorrió el cuerpo al comprobar que no. ¿Estaba permitido que interactuáramos a través de las redes sociales? Algo me decía que no. ¿por qué se comportaba como un capullo conmigo y luego le daba "me gusta" a mi foto? ¿Era una especie de truco mental para volverme loca?

Sin poder evitarlo, volví a entrar en su perfil, igual que había hecho aquella misma tarde. Necesitaba volver a analizarlo, porque Lucy me había interrumpido en medio de mi sesión de cotilleo. La primera foto que aparecía era una en la que salían Leo, Charles y Alex. Parecía que alguien había capturado aquel momento sin que se dieran cuenta, mientras reían. Pasé muchos segundos observando aquella foto, y no fui capaz de decidir cuál de los tres era el más guapo, pero lo que si me quedó claro, con tan solo ver aquella foto, era del grado de complicidad que había entre aquellos chicos.