Perdón por ser como soy, perdón por mis constantes nervios, por mis malas actitudes, por mi egoísmo.
Por esperar, por pretender que sientas como yo, por esperar que te importen las mismas cosas.Perdón por sentir ansiedad de forma eterna, perdóname por lastimarte con mis heridas, por herirte con mis hábitos.
Odio dudar, dudar de nosotras. Yo me siento bien con vos, tu amor me hace feliz, pero incluso cuando lo hago, cuando sobre pienso siento estorbar, a veces soy muy distante y precisamente por ello me siento culpable, daño a los demás alejándome, pero si estoy cerca lastimó más con mis pensamientos intrusivos, con mis miedos, con mis inseguridades que no hacen más que hacerme entender que mi único camino quizás sea estar sola.
No permitirte que te acerques porque quizás no siento ser suficiente como para sentirme amada, o que realmente me amen y me cuiden.Entendí que sólo estando en la oscuridad me siento reconfortada, dónde mi acosadora ansiedad de terciopelo desaparece y mis inseguridades de satén se rasgan, en ese rincón de mi habitación donde nadie puede juzgarme, porque nadie puede verme y por lo tanto, tampoco escucharme.
Desearía que te interesara más cómo me siento, pero parece ser un tema del cual nadie se preocupe, entonces, quisiera que a mí tampoco me importara.
Perdón por haber perdido mi cercanía y mis gestos de ternura por estar ensimismada en mi tristeza, en mi pesar, en mi melancolía.
7-2-23 1:01 A.m.
ESTÁS LEYENDO
Cosas que nunca dije
RomanceEn este libro se encuentran unos escritos realizados por mí, a medida que crece mi relación con mi novia. En estas páginas están reunidos mis sentimientos, mis pensamientos intrusivos de madrugada, mis dudas y mis inseguridades inconfesables. Esper...
