NO TE VAYAS.

Hola a ti también amigo Alex.

Capituló dieciocho.

Después que llegue a casa me dirigí al baño, una ducha era lo único que me relajaría, tantas cosas en un solo día, con Damon no he hablado y la verdad no quiero hablar, no quiero hablar con nadie, hoy fue un día faltar, nunca había sido irrespetuosa con ningún profesor y al ver que lo fui me siento, ¿bien?. Si me siento bien, la verdad estoy harta que me quieran pisotear independientemente que sea mi profesor.

Me cambio y decido ponerme mi pijama negra sin sostén, conecte mis auriculares y me deje llevar al son de Alone, Pat de Ava Max.

La música es mi único escape de esta realidad, me gustaría poder gritar y decir todo lo que tengo para decir, poder conducir un auto e irme lejos, escucho mi teléfono sonar, ¿quien podrá ser?.

–OLIVIA QUE HICISTE!!– es Lorena y por cómo está me imagino que está preocupada.

–Lorena deja de gritar por el amor de Dios, me duele la cabeza.

La verdad se me pego el dolor desde que salí del colegio, cuando estoy de mal humor hasta los huesos me duelen.

–Pero Olivia que hiciste, no tenías tiempo porque hacer lo que hiciste, era a mi la que la castigaran no a ti, tú no hiciste nada malo, al contrario me ayudaste y no es justo que te eches la culpas de lo qué pasó!.

Amo a mi mejor amiga, por esa razón no me importo echarme la culpa porque en gran parte es culpa mía, pero no solo por esa razón iba a dejar que le gritaran.

–Lorena tranquila no pasa nada...

–Que no pasa nada, podrían expulsarte!!, está consiente de eso ¿verdad?.

Si están muy consiente de que es muy, pero muy probable que me expulsen y me daba miedo, pero no porque me afectara en las clases sino en que ya no vería ni estaría con Lorena y ya no vería a Damon.

–Lo se y no me importa, el profesor Martín está acostumbrado a querer humillar a los demás y eso no es justo Lorena, tu ves como los trata, ya era hora de decirle sus verdades.

Se queda en silencio la línea.

–Es verdad, ese señor es una persona muy mala, te digo algo- la verdad no estoy asustada.

–¿Que?– me pregunta.

–No me siento mal al contrario me siento súper bien sentí que descargué toda mi frustración y todo lo que tenía por dentro, no te preocupes en verdad, tu quédate tranquila.

–Olivia eres la mejor amiga, tu e Isabella son las mejores amigas que pude pedir, por cierto me hablo hace unos días, me dijo que vendría, ¡estoy emocionada!

–Si, me hablo hace unos días y me dijo que vendría, no puedo esperar a que regrese, necesitamos salir las tres, bueno con su nuevo novio también.

–Así me contó, me siento feliz por ella, ojalá que ese romance dure.

–Igual yo, te dejo necesito dormir un poco por todo lo que sucedió hoy, te quiero.

–Yo también te quiero, y gracias de nuevo Liv.

–De nada, bye.

Cuelgo la llamada y decido dormir un poco, hoy fue un día muy pesado. Rezo para que no me expulsen del colegio, no quiero imaginarme a mi mamá cuando se entere, estaré castigada de por vida. Cierro los ojos y me quedo profundamente dormida.

Siento que mi teléfono vibra y no paran de entrar notificaciones, abro los ojos a cómo puedo, reviso mi Instagram y veo qué hay demasiadas solicitud de seguimientos, son más de cien, entro en mensajes y veo un video donde estoy yo discutiendo con el profesor Martín.