NO TE VAYAS.

¿Te gusta leer?

Capituló veintidós.

El sabor de su boca es tan adictiva que no me molestaría estar todo el día así con el, se siente tan bien tener este sentimiento, ese..... calor.

Se que apenas llevamos un día estando juntos, pero no puedo negar que el es el amor de mi vida, sus actos de caballerosidad, su forma de tratarme. Cada que mi abuela me contaba la forma en cómo el abuelo la conquistó me hacía desear que alguien me tratara de la misma forma que a ella, tener a una persona que se interese por mi, me ame de la misma forma que yo amo. Damon a pesar que es mi profesor y es mayor que yo, se porta de maravilla conmigo, se que es muy rápida mi decisión de amarlo, pero no puedo controlar este sentimiento tan grande que hace que me sienta como una completa tonta, me duele el estómago, me sudan las manos y no se como comportarme cundo estoy con el aunque parezca que estoy un poco calmada, por dentro me estoy muriendo de nervios. Nos separamos para poder respirar, veo que tiene los labios rojos y las mejillas un poco coloradas, si a el apenas se le nota no quiero imaginarme como estoy yo.

–Estoy muy feliz de estar contigo así, se que es complicada nuestra situación, pero te prometo que será por poco tiempo . No dejare que nada ni nadie se interponga entre nosotros. Olivia tu hiciste que dejara de lado mis principios éticos y la verdad me siento muy feliz porque gracias a eso puedo estar con la persona que quiero.

¿Este hombre es real?

–También estoy muy feliz Damon, es la primera vez que me siento así con una persona y espero que esto no acabe.

–Te prometo que haré lo que sea necesario para estar junto a ti.

Toma mi mano y la entrelaza con la suya, terminamos de comer nuestra rebanada de pastel, platicamos un rato sobre cómo le va en el trabajo y todo en cuestión, me cuenta lo difícil que fue todo con a la muerte de su papá y como Maddy la pasó, me pidió de favor que me hiciera su amiga, que la aconsejara, me contó que no sabía absolutamente nada de que yo fuera la hija de la mejor amiga de su mamá, hablamos de lo que nos gusta y de lo que no.

–¿Que más te gusta hacer?– me pregunta ansioso.

Me gusta la forma en que se interesa por mi, me gusta que me pregunte y quiera indagar más.

–Me prometes que si te digo no te burlarás.

Le señalo con el dedo en modo de advertencia.

–Olivia yo jamás me burlaría de ti y más si es con algo relacionado que te gusta hacer– dice levantando levemente los labios.

–Está bien, me gusta..... leer.

Levanta las cejas por lo que le acabo de decir y luce muy guapo haciendo este tipo de gestos.

–¿Te gusta leer?– me pregunta algo sorprendido.

–Si, desde que tengo trece me adentre al mundo de la lectura, cuando estoy feliz
me gusta leer, cuando me siento triste mi escapatoria es leer, me encanta la forma de como las autoras desarrollan un personaje, me encanta como la historias de a poco cobra vida, como los títulos de las novelas al final le encuentras sentido. Me estoy leyendo una libro muy bueno que se trata de una chica que está enamorada de su mejor amigo, pero el chico solamente la ve como su mejor amiga, la chica se decepciona y entonces decide que sería mejor tal vez conocer a alguien que.... – me corto al instante cuando lo veo verme totalmente concentrado por todo lo que estoy diciendo sin interrumpir.

Damon al ver que me e quedado callada arruga las cejas y yo solo puedo ponerme roja de la pena, seguramente estuve hablando demasiado rápido.

¡Ash que tonta soy!

–¿Porque paraste de hablar?– me dice algo intrigado.

–Seguramente te estoy aburriendo con todo esto de la lectura– digo agachando la cabeza.