Capítulo 13

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Nerea

Zarheo acababa de regresar de su entrenamiento matutino, normalmente yo siempre lo acompañaba pero desde que mejoro su fuego control estuvo llendo solo. Yo traté de enseñarle lo básico pero como no soy maestro fuego no hubo más que pudiera aprender de mi. Parecía más que yo quería entrenarlo como maestro agua y eso no era bueno porque nuestros estilos de control eran totalmente opuestos.

Zarheo: ¡Estoy en casa! 

Mar: Bienvenido mi amor ¿tienes hambre? ¿quieres comer?

Zarheo: Estoy bien mami, no tengo hambre.

Mar: ¿Comiste algo del bosque? -pregunté porque no era normal que Zarheo regresara sin hambre, quizá había comido algo afuera.

Zarheo: Algo así... pero no importa ¿Dónde está Kriz?

Mar: Tu hermano sigue dormido ¿por qué no vas a despertarlo mientras yo termino de preparar su desayuno?

Zarheo asintió y se fue a la habitación de su hermano, mientras yo me quedé en la pequeña cocina que teníamos en la casa.

***
*En la habitación*

A Zarheo le encantaba despertar a Kriz porque la forma en que lo hacia era bastante... sorpresiva.

Zarheo: psss... ¡psss Kriz! -dijo cerca de él.

Pero Kriz ni siquiera se movió, seguía profundamente dormido. Entonces Zarheo empezó a picarlo suavemente con el dedo pero tampoco pasó nada.

Zarheo: Creo que es hora de mi plaaaan.

Tomó un pedazo de papel que había cerca y uso su fuego control para encenderle una esquina, cuando el papel empezó a sacar humo se lo acercó a Kriz para que oliera el olor a quemado. Con esto no tardó en despertarse agitado y de un brinco.

Kriz: ¡Ahhhhhh! ¡¡Zarheo volvió a quemar la casa!! -dijo Kriz en cuanto despertó.

Cuando escuché el grito asustado de Kriz de inmediato fui a ver que pasaba.

Mar: ¡¡¿Qué sucede?!! -dije abriendo de un portazo.

Pero dentro solo me encontré a Kriz totalmente asustado y apenas entendiendo que pasaba, mientras que Zarheo estaba muerto de la risa en el piso.

Zarheo: jajajaja, hubieras visto tu cara Kriz "¡Ahhhhhh! ¡¡Zarheo volvió a quemar la casa!!" -dijo imitando los gestos de Kriz- fue super gracioso.

Viendo que todo era una de sus bromas que tanto les gustaba hacerse me sentí un poco más calmada y solté un suspiro de alivio.

Mar: Hay Zarheo... un día vas a matar de un infarto a tu hermano -me acerqué a Kriz y lo abracé para que se calmara un poco- el desayuno está listo niños, vengan a comer.

Luego de un rato ya estábamos los tres comiendo en la sala.

Mar: ¿Cómo te fue en tu entrenamiento de hoy mi amor?

Zarheo: Bien mami ¡ya casi puedo crear una flama enoooorme! 

Mar: ¡Wow! ¿de veras?

Zarheo: Siiii, creo que en poco tiempo voy a poder ir a salvar pueblos por mi mismo -dijo muy orgulloso.

Kriz: ¿Y yo? Yo también quiero ayudar a las personas como ustedes ¿cuándo voy a poder acompañarlos?

Mar: No es tarea fácil ayudar a los demás, me alegra que los dos tengan un espíritu valiente para luchar contra las personas horribles que nos encontramos en este mundo... pero me temo que no es tiempo de que ninguno de los dos vaya solo a ningún lado.

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