Zuko
Estaba trabajando en mi estudio cuando de pronto alguien entró corriendo y abriendo la puerta sin avisar. Ni siquiera me dio tiempo de molestarme por esa acción ya que noté de inmediato que se trataba de Zarheo.
Me levante de mi asiento rapidamente y mi sorpresa aumento cuando siguió corriendo hacia mi y me abrazó con fuerza. No sabía que hacer y mucho menos lo que pasaba pero si noté que estaba llorando.
Zuko: ¡Zarheo! ¿Qué pasa? -pregunte sorprendido.
No me dijo nada pero parecía bastante triste y molesto. Voltee a ver a mi sirviente que estaba sorprendido tanto como yo pero parecía entender más sobre esta situación. Con un gesto de manos me indico que lo abrazara y eso hice; se sentía extraño, era como un sentimiento cálido de proteger a alguien pero que no lograba comprender del todo.
Mi abrazo ayudo a tranquilizar a Zarheo y tras unos minutos dejó de llorar y al fin habló.
Zarheo: Zuko... ¿podrías enseñarme fuego control? -dijo de la forma más linda y tierna posible.
Me sorprendí pero no me negué.
Zuko: Creo que el patio de entrenamiento está vacio a esta hora, vamos -le dije tratando de ser gentil, cosa que casi no me salía.
Tyzen: Pero Su Alteza, aún hay mucho trabajo por hacer, no creo que sea buena idea que lo deje.
Zuko: Lo sé, pero esto debe ser más importante... al menos eso es lo que siento.
Di la vuelta y llevé a Zarheo de la mano hasta el patio de entrenamiento, en el camino me di cuenta de que realmente se veía decaido pero no sabía la razón.
Zuko: ¿Y Nerea? ¿Por qué no estás con ella?
Zarheo solo miró hacia otro lado y comenzó a llorar levemente de nuevo. Supuse que esa era parte de la razón por la que estaba aquí y no pregunté más. Ya habíamos llegado al patio.
Zuko: ¿Qué es lo que quieres que te enseñe?
Zarheo: Pelea conmigo, quiero aprender -dijo aún decaido.
No sabía que tan buena idea sería pelear con un niño, aunque se tratara de un prodigio no podía atacarlo de manera desmedida. Además estaba triste, definittivamente pelear no sería bueno porque quien sabe lo que pasaría con su ánimo si perdía o ganaba.
Zuko: Que te parece si te muestro mi rutina de entrenamiento y después me dices si quieres aprender algo de ella.
Zarheo: Si... ¡Si, está bien! -comentó algo más animado.
Me preparé y me puse en posición, mi rutina era algo diferente a lo que iba a mostrarle en realidad, pero empezar por mostrarle lo básico se me hizo un buen comienzo.
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Tribu Nacional
FanfictionEl Príncipe de la Nación del fuego y la Princesa de la Tribu Agua del Norte, eran la pareja Real hasta que aquel incidente los separó y sin saberlo también los rompió... las cosas nunca volverían a ser como antes pero... ¿era acaso eso algo malo? Vi...