capítulo 4

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No sabíamos muy bien por qué, desde que había llegado el nomade llamado Laurent, me había comenzado a sentir extraña, estaba enojada pero no sabía por qué, mi madrina siempre intentaba hacerme sonreír, y más cuando confesó que ella sentía que Laurent podría llegar a ser su compañero por la eternidad, pero por mi lado, solo podía desconfiar de él, algo me gritaba que no confíe en el, pero por Irina lo soporte, la primera vez que entré en fase, fue con una fiebre, sentía que mi cuerpo quebraria, Laurent se había marchado pero según el era para poder despedirse de alguien, a los días, me convertí en un gran lobo blanco, estaba asustada al principio, no podía entender que pasaba, cuando conseguí volver a mi estado común, fue cuando muchas verdades salieron a la luz.

- encontramos esto en el auto de tu madre, el día que la encontré, quisimos esconderlo hasta que cumplieras 18 pero, creo que sería bueno que lo leas ahora.

- mi madre escribió esto? - pregunte feliz mientras abría la carta.

Querido Billy Black

Te escribo esto ya que me iré, se que no debería despedirme, por lo que dijiste, pero me siento en la necesidad de decirte que, en mi corazón, amaré a nuestro hijo como si tu lo quisieras, ya que en el fondo, aún sueño conque ese día me hubieras dicho que lo nos las arreglariamos juntos, y que cualquier consecuencia la aceptaríamos, pero no fue así.
Aun recuerdo cuando de niños me invitabas a las reuniones del consejo, y escuchábamos leyendas quileutes, de los grandes guerreros lobos, y más, me encantaría volver a esos tiempos, Charlie siempre apostó a que seriamos algo, y nos reíamos pero ahora creo que ese algo, jamás debió ser, algún día volveré, no mañana ni pasado, pero en mi corazón, el lugar que ocupabas tu como mi persona, ahora lo ocupa mi bebé.

Atte Isabella Swan.

Con mucho enojo, suprimi mis impulsos y mantuve la compostura, era la boda de mi primo, al llegar la hora, nos sentamos, por el rabillo del ojo podía ver como el hombre hablaba con la madre de Seth, pero en la entrada de la novia, me calme, Bella ...

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Con mucho enojo, suprimi mis impulsos y mantuve la compostura, era la boda de mi primo, al llegar la hora, nos sentamos, por el rabillo del ojo podía ver como el hombre hablaba con la madre de Seth, pero en la entrada de la novia, me calme, Bella era hermosa en su vestido, era ajustado pero se iba soltando sin ser esponjaso, sus mangas delicadas, y su espalda que en forma de ovalo atraía las miradas, parecía tímida pero le favorecía.

Durante la ceremonia cuando el sacerdote preguntó a los novios, escuche el nombre más impresionante del mundo, que hizo que mis ojos se llenarán de lágrimas.

••𝕾𝖎𝖊𝖓𝖙𝖔 𝖋𝖗í𝖔••𝕻𝖆𝖚𝖑 𝕷𝖆𝖍𝖔𝖙𝖊••Donde viven las historias. Descúbrelo ahora