••𝕾𝖎𝖊𝖓𝖙𝖔 𝖋𝖗í𝖔••𝕻𝖆𝖚𝖑 𝕷𝖆𝖍𝖔𝖙𝖊••

capítulo 37

La mirada de aquel hombre sobre Charlie lo hacía tener escalofríos, su hermana siempre había sido un cerebrito en estudiar pero el siempre había sido un prodigio en poder recordar todo lo que veía, como policía esa habilidad solo se desarrollo hasta el punto de recordar cualquier rostro con solo verlo, por lo que ver a un sujeto que no había cambiado nada en 13 años era aterrador.

- escucha todo esto es solo tu imaginación - intento decir Alistair en un susurro para que nadie adentro de la casa lo escuche.

- se que existen misterios más haya de mi comprensión pero quiero saber si dentro de esos misterios eres peligroso o no para mi familia.

- por supuesto que no, soy amigo de Carlisle y en algun momento lo fui de...

- de quien?

- de Isabella - susurro mientras de su bolsillo sacaba una fotografía era una arrugada pero se veía perfectamente a dos personas.

Era Isabella en su casa en Alaska, tenía el un pequeño bulto en su vientre mientras que a su lado estaba Alistair con una mirada divertida pero molesta ya que se notaba que el no quería estar ahí, pero aun así los dos estaban ahí sacándose una fotografía.

En silencio Charlie tomó la fotografía en sus manos el sabía que ese sujeto no era normal pero aun así decidió dejarlo pasar, cuando ambos entraron se encontraron con todos mirándolos atentos, Bella parecía curiosa ya que el vampiro parecía feliz de estar en aquella casa donde había muchas fotos de familia.

- papa, no tuvimos tiempo de envolver tu regalo pero aquí esta, con 3 días de pesca en el río freser - explico Bella sonriente.

- y me temo que no es reembolsable- agregó Edward haciendo que el hombre de bigote suspire rendido.

- quieren deshacerse de mi? Porque esta esta funcionando.

Con toda la calma del mundo los demás adolescentes comenzaron a intercambiar regalos.

- muy bien esto es para ustedes 4 - dijo Olwen extendiendo 4 paquetes para Paul, Jacob, Leah y Seth - son mi manada pero creo que nunca me hice responsable de ayudarlos.

Los 4 chicos miraron sus regalos, era una copia de lleva con un papel con un número.

- que es esto? - pregunto el más joven.

- Olwen...- intento regalarla Edward al entender que eran esos dos objetos.

- esa llave es de una de las propiedades de Carlisle, me la dio por mis 15 años, esta en Alaska, se que esta muy lejos pero si alguno alguna vez quiere respirar aire nuevo, esa casa siempre estará abierta para ustedes.

- y estos números? - pregunto Leah con un nudo en su garganta identificando que eran pero necesitando que se lo afirme la rubia.

- nuestra cuenta bancaria, todos somos adolescentes y ser lobos, estudiar y trabajar es difícil así que podrán retirar cuanto dinero quieran, tiene el nombre de Farkas.

Sin más todos saltaron hacia ella diciendo gracias por aquel regalo, Sam era un hombre amable al abrirle sus puertas pero los problemas de la vida exterior siempre los había atormentado por lo que recibir estos regalos los hacia muy feliz.

- mi novia se acaba de convertir la suggar mommy de la manada - habló Paul riendo mientras abrazaba a Olwen.

- bueno si me permiten quiero darle un regalo a Olwen - señaló Charlie mientras tomaba un regalo bajo el árbol.

- para mi? - pregunto la chica sorprendida.

- me ayudo Sue, yo no soy bueno con los regalos.

- ya me di cuenta - dijo Bella.