1. Conflicto

4K 211 30
                                    

Kyle y Stan pasaban todo el tiempo juntos, visitándose mutuamente y estando días viviendo bajo el mismo techo. Eran la primera opción del otro al momento de conversar o simplemente para brindarse apoyo moral. Stan adoraba la relación que tenía con su mejor amigo, sin embargo, desde que Cartman y Heidi rompieron, Kyle no hablaba de nada más que de la "pobre chica" que estaba siendo manipulada por su exnovio, y comenzaba a cansarse de eso.

Los días parecían más aburridos y levantarse de la cama para asistir a clases era cuestión de doble esfuerzo. Aun así, siguió intentándolo. Ese día llegó minutos tarde a clase porque su padre, que lo llevaba en auto, se había demorado más de lo habitual discutiendo con su madre.

Cuando por fin llegó, vio al final del pasillo un círculo de estudiantes gritando y apoyando algo, por lo que corrió hacia ellos.

La multitud veía a Kyle encima de Cartman golpeándolo. Era algo común para ellos, pero dadas las nuevas circunstancias, las peleas de aquellos dos habían escalado en intensidad. Kenny abrazaba al pelirrojo por detrás para separarlo. Mientras Stan se dejaba caer al suelo para intentar liberarlos de su agarre desde allí.

— Tranquilo, ey, déjalo ir. — Decía el rubio entre risas. Tenía un sentido del humor muy extraño y estas situaciones no le estresaban. Extendió ambos brazos, lo levantó de Cartman y lo mantuvo quieto. Kyle no podía dejar de temblar y de intentar zafarse de su agarre.

— ¡Judío roba-novias! ¡Eres una maldita basura! — Gritó Cartman desde el suelo. Stan estaba tratando de ayudarlo a levantarse, pero Eric no cooperaba.

La chica castaña con el sombrero de flores se acercó al centro, parándose frente a Kyle, quien todavía estaba sostenido por Kenny. — ¡Te vas a meter en problemas, basta! — Exigió con ojos muy preocupados. — Déjalo así. — Continuó. Parecía querer llorar y sólo verla así hizo que el pelirrojo se calmara.

Cuando el rubio notó la presencia del director PC, se escapó y desapareció. Stan creía que la razón eran sus anteriores llamadas de atención, ya que no podía permitirse el lujo de volver a meterse en problemas. — ¿Y ahora qué diablos pasó? — Intervino el adulto. — ¡A mi oficina, Broflovski, Cartman, Turner y Marsh!

Stan refutó inmediatamente y con el ceño fruncido. — ¿Yo? Pero si yo no...

— ¡A mi oficina!

El área comenzó a despejarse y los cuatro se dirigieron por el pasillo. Podía observar a Cartman durante todo el camino, girándose de vez en cuando para mirar hacia atrás con mirada asesina. Luego seguían Heidi y Kyle, quienes se miraban sin decir nada.

Una vez dentro de la oficina, el director los obligó a sentarse y contar sus versiones. — Kyle manipuló a mi novia para que rompiera conmigo. — Comenzó a declarar Cartman. — Cuando lo logró, comenzó a caminar con ella donde quiera que yo estuviera, poniendo caras sucias de judío y presumiendome que la había ganado.

— ¡Cállate, culo gordo, no pasó así! — Refutó inmediatamente el pelirrojo.

— ¡Nos vamos a turnar, Broflovski! — El director lo interrumpió. — Continúa Eric, y sin ofender.

Stan no sabía por qué tenía que estar presente ahí, y realmente deseaba poder irse de inmediato. Era una pérdida de tiempo de todos modos. ¿Qué quería solucionar el director con esa charla? Cartman y Kyle nunca arreglarían las cosas entre ellos.

— Hoy no fue diferente a los demás. — Continuó Eric. — Comenzó a ofenderme y amenazarme pero no pude alejarme lo suficiente cuando empezó a golpearme.

El pelirrojo no dejaba de moverse de su lugar, parecía tener más energía para querer golpearlo. Stan observó a su lado cómo sus pies se torcían y sus manos quedaban atrapadas en la desafortunada tela de sus pantalones.

— Está bien, Marsh, te toca a ti.

Stan saltó los ojos ¿para qué quería su versión? en primer lugar, no tenía idea de qué decir, y mucho menos interés. Todos volvieron su mirada hacia él, que hasta ese momento sólo había visto el suelo. No quería defender a ninguno, ya estaba muy harto de la actitud de ambos por igual. — Había mucho escándalo en los pasillos. — Tragó saliva y continuó. — Cuando llegué a ellos, Kyle estaba encima de Cartman. No sé mucho más.

El pelirrojo ya había apartado la mirada de su mejor amigo y miraba al director con las cejas bajas y los ojos brillantes. Stan sabía que estaba decepcionado y esperaba más de él. Lo supo por la forma en que la mandíbula de Kyle se había endurecido y por sus labios fruncidos.

— Está bien, continúa Kyle.

— ¡Es un idiota, un hijo de puta acosador!

— ¡Broflovski! Suficiente. No vas a venir a mi oficina con esa actitud. — Advirtió el adulto.

Kyle se ajustó bien su ushanka mientras miraba al director a los ojos y volvió a hablar. — Estábamos hablando en el pasillo cuando lo vimos acercarse. Le sugerí caminar en dirección contraria para evitarlo, pero empezó a gritarnos e insultarnos. — Suspiró, miró a Heidi y continuó. — Lo habría ignorado, pero dijo cosas despectivas sobre Didi frente a todos los que caminaban por los pasillos. Entonces lo golpeé para que se callara...

— ¿¿Un golpe?? Mírame a la cara, Kahl, ¡está rota, idiota! — Cartman señaló su rostro mientras levantaba su nariz para evitar que goteara.

— Sin insultos, Eric. — El director volvió a hablar. — De acuerdo, ¿qué cosas fueron taaan horribles para que reaccionaras así?

— No voy a repetirlas. — En su voz se podía palpar la ira que volvía a crecer en él.

El diálogo enfermó a Stan, era una pérdida de tiempo estar allí y ver cómo su mejor amigo actuaba como el mayor protector de la chica... ¿por qué la defendía tanto de todas maneras? — ¿Puedo retirarme? No tengo nada más que aportar aquí. — Habló con fastidio.

— Un segundo Marsh, estamos en algo. ¿Heidi? ¿Podrías contarnos tu versión?

— Bueno, esencialmente eso es lo que Ky ya contó... Eric habló cosas horribles y-

— ¿Puedes mencionarlas?

— Dijo que yo, que yo, uh... — Los ojos color avellana de Heidi se estaban poniendo vidriosos.

— ¿No fue suficiente con que la mitad de los estudiantes lo escucharan? — Kyle salió en su defensa. — ¿Tiene que repetirlo a usted también?

La chica se apresuró a salir de la oficina mientras contenía las lágrimas después de eso. Kyle iba a seguirla, pero se detuvo en cuanto el director volvió a hablarle. — Sinceramente, tu actitud me está cansando, Broflovski.

— Sí, ya somos dos... — Mencionó Stan con mucho peso en su voz. Estaba mirando al techo, recostado en su asiento e ignorando la mirada de su mejor amigo.

— Hablaré con tus padres y te bajaré los puntos de comportamiento. No puedo suspenderte por tu historial limpio y excelentes calificaciones, pero, otra escena como esta y no tengas dudas de que lo haré.

— ¡¿Y Cartman?! — Preguntó de inmediato. — Nos acosa todos los días, él tiene-

— No hay suficiente evidencia para decir nada sobre él, a diferencia de ti, con tus puños ensangrentados y su nariz rota.

— ¡Pero cualquiera podría decirte lo mierda que es! ¡Incluso usted lo sabe! ¡Stan, díselo! — Giró hacia el pelinegro en busca de ayuda.

Pero él nunca quiso verse involucrado en todo eso. Odiaba las discusiones, lo ponían ansioso. ¿Le dolió que su amigo fuera castigado? por supuesto. En el pasado lo había salvado en varias ocasiones como ésta, pero justo en ese momento, no le nacía absolutamente nada.

— ¿Stan? ... — La rabia de Kyle se había ido, ahora sólo buscaba a su mejor amigo, pero no tenía respuesta.

— Retirense. No dudes que habrá peores consecuencias si continúas así. — Señaló a Kyle.

Cartman inmediatamente salió de la oficina, Stan lo imitó y caminó lo más rápido que pudo, pero cuando se había alejado unos pasos de él, una mano enguantada de color verde se extendió y lo jaló del brazo.

— Amigo, ¿qué diablos? — Dijo con el rostro contorsionado por el disgusto.

Stan estaba molesto, ¿por qué exactamente? no sabía... pero su cabeza no estaba funcionando bien para tener esa conversación. — Lo único que vi fue que le pegabas como un neurotico, ¿querias que mintiera? — Dijo sin rodeos.

— ¿Qué? no, pero tú me conoces. — Sus ojos eran grandes y sus cejas estaban sorprendidas. — ¡Nunca reaccionaría gratis, lo sabes!

No podía negarle eso, sabía bien que Cartman siempre lo provocaba. Kyle era muy susceptible y receptivo, rara vez era al revés. Stan hizo una mueca y suspiró. — Tienes razón, yo-

— ¿Y cómo permitiría que siguiera lastimándola? — Añadió el pelirrojo antes de dejarle terminar de hablar.

Lo cual volvió a irritarlo por una extraña razón. — Bah, tengo que irme. — Dijo molesto y comenzó a dar un paso atrás cuando Kyle lo acusó nuevamente.

— ¿Stan? ¿Qué diablos, amigo? Estoy hablando.

— Escucha, tampoco eres inocente todo el tiempo. Sí puedes llegar a ser muy idiota.

—  ... ¿Qué?

— Actúas como un ladrón de novias rompiéndole el corazón al gordo. ¿No era obvio que al llevársela, él iría tras de ti? Incluso parece que buscas tener siempre un conflicto con él. — Su boca quería escupir ese veneno simplemente para hacer daño. ¿Por qué se sentía así? No estuvo bien...

— Amigo, ella no es un objeto para ''robar''. Odio que todos usen ese término cuando hablan de Didi. ¿Por qué no-

— Sí, sí, lo que sea, Kyle. — Terminó de decir. Puso los ojos en blanco, se dio la vuelta y continuó hacia su destino sin dejarle terminar la frase.

Siempre has sido tú. (Editada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora