Antes de ti. (En Proceso)

Capítulo 8.

Emma.

Son las 6 pm para cuando salgo del baño llevando un precioso vestido azul marino ajustado hasta la cintura y cayendo hasta más arriba de las rodillas.
Es sencillo, pero precioso.

—¿Que tal? — pregunto a Carol, quien se está maquillando.

Lleva un jeans negro y un crop top naranja. Y unos tacones del mismo color.

— Estás hermosa, sabía que ese vestido era para ti. — dice sin dejar de mirarme con una sonrisa para volver al trabajo tan pronto como asiento dándole la razón.

Y si, Carol me prestó su vestido.

— Estás preciosa, muñeca. — dice Anna quien está acostada en mi cama mirando su móvil.

Parece una emo con ese vestido negro ceñido al cuerpo, con mangas transparentes las cuales les llegan hasta las muñecas y lo que obviamente no le puede faltar:
Sus botas de estilo militar.

— ¡Listo! — chilla feliz Carol al terminar su perfecto delineado.

— El mío quedó mejor.

— ¡Oye, no! — dice Carol haciendo un puchero.

Anna me mira divertida y capto la indirecta:

— Oye, Carol, te ves más alta. — digo señalando sus tacones.

— ¡Emma! — chilla haciendonos reír. — ¿Cómo te llama, Christian? — al oír su nombre me callo sin poder evitar recordar lo que sucedió la última vez. — ¡Ah, si!, ¡Minions!

¡Oh, no!

— ¡No me llames así! — ahora soy yo quien chilla.

— ¿Por qué?, ¿Te recuerda a alguien?

Carol suelta una carcajada y yo solo quisiera aventarle un ladrillo.

— Harían linda pareja.

— ¡Que no! — grita Anna claramente molesta. — Es peligroso estar con el.

¿Por qué se altera tanto?, ¿Que tan peligroso es?

<< ¿Y si lo comprobamos?>>

¿Cómo?

<< ¡Que pregunta! Solo tienen que follar>>

Olvídalo. No sé cómo eso ayuda.

Carol me hace señas para sentarme y ella comienza a maquillarme.

Al terminar contemplo su trabajo y... Waho.

Es sencillo para la ocasión pero hermoso, solo hizo su perfecto delineado —como siempre—  y aplicó rubor en mis mejillas, máscara de pestañas y lápiz de ojos.

— Tus ojos son hermosos . — dice Anna.

— ¿Intentas animarme mientras tú tienes preciosos ojos azules? — ella ríe.

— Pero si son divinos. — dice Carol con una sonrisa.

— Claro, claro. — pongo los ojos en blanco para molestarla más.

— Serás tonta. — ríe para luego mirar su móvil. — Ken ya está abajo.

¿Ken también irá a la fiesta?

<<Esto será interesante.>>

—Oh si, Ken. — suelta Anna con una risita. — ¿El mismo por el que babeas?

¿A Carol le gusta Ken?

Como si quisiera responderme Carol se pone roja enseguida.

— ¡Ay, por favor!