Carmesí | KimChay

Capítulo 19

Los vampiros son seres que no sufren por ninguna enfermedad. Ninguna. Sus cuerpos estaban "diseñados" para ser perfectos, por eso era que se encontraban en la cima de la cadena alimenticia sin ningún depredador que asechase su especie y sin ningún padecimiento que amenazara con acabar con su raza.

Todos los días Chay se alimentaba muy bien, lo hacía incluso hasta dos veces con sangre de animal. El proceso para cambiar la alimentación era un poco tardado, no era sencillo para el cuerpo acostumbrarse tan rápido a beber solo sangre para sobrevivir, sin embargo, Chay ya estaba en la fase final de dicho procedimiento. Dentro de poco podría empezar a beber sangre humana, y eso lo emocionaba y lo ponía nervioso al mismo tiempo.

Korn le había comentado que ellos se alimentaban de personas que estaban en prisión y que había cometido crímenes realmente aberrantes o de personas que estaban a punto de morir. Sin embargo, le dejó en claro que no eran una clase de héroes, ellos no estaban ahí para limpiar a la humanidad de personas no deseadas, pero tampoco les gustaba aprovecharse de los mortales. No querían portar una bandera de salvadores cuando no era así, entendían que matar era un mal necesario para su propia sobrevivencia.

No obstante, y pese a que se alimentaba bien y quedaba satisfecho con su porción diaria "de comida", llevaba ya varios días sintiéndose extraño. Extraño en el sentido de sentirse cansado, experimentaba fatiga leve por lo general al final del día y eso le recordó sus días como mortal cuando estaba enfermo. Se preocupó, ¿Y si su conversión no había sido completa? ¿Y si haber bebido la sangre de Kim antes de tiempo había provocado que todo saliera mal?

Kim incluso le había hecho el comentario de que se veía más pálido y que tenía ojeras muy acentuadas. Pero que seguía luciendo hermoso, ¡Sí! el mismísimo Kimhan Theerapanyakul le había dicho esas palabras, así tal cual "aún pálido y con ojeroso sigues luciendo muy hermoso, eres el vampiro más bello que he visto". Se arrojó a sus brazos y le dijo que le gustaba que le dijese cosas bonitas pues no solía hacerlo muy a menudo. La actitud de su compañero, "para variar", fue la misma de siempre, solo rodó los ojos y le dijo que dejara de molestar.

Lo cierto era que Kim había cambiado aún más precisamente desde que empezó a sentirse enfermo. Era más condescendiente con él, le tenía más paciencia, lo dejaba cazar más de un animal por día, procuraba que descansara lo suficiente y un poco más y lo acurrucaba entre sus brazos cuando reposaban. En general se estaba portando como un novio amoroso aunque sin cambiar su semblante serio y reservado.

No obstante, su estado lo preocupaba y mucho. No quería por nada del mundo volver a caer enfermo y no poder curarse. Precisamente por eso se había convertido en un vampiro, la vida no podía ser tan despiadada con él como para permitir aquello ¿O sí?

- No es normal que pase algo así, ¿Será que nos hemos tardado en dejar que beba sangre humana? – escuchó como Kim entraba con Korn a la habitación que ambos compartían.

- Buenos días Chay – saludó su suegro acercándose a la cama en donde permanecía acostado – no, no nos hemos tardado en eso, incluso debemos adelantar el proceso, es necesario que empieces a beber sangre humana de ser posible a partir de hoy –

- ¿Hoy? – preguntaron Kim y Chay al mismo tiempo.

- La sangre le dará más energía, la va necesitar mucho – anunció Korn emocionado – mi nieto crece en el vientre de Chay, debe comer por dos ahora – reveló.

Korn soltó la noticia sin que ninguno de los dos se lo esperara. ¿Un bebé? ¿Realmente había dicho que un bebé crecía en el vientre de Chay? ¿Lo había dicho así, tan tranquilo, como si aquello no fuera algo tan extraordinario?

- ¿Es esto una broma Korn? – preguntó Kim conociendo a su padre.

- ¡Por supuesto que no hijo! – se levantó y lo abrazó con fuerza