ｓｅｖｅｎ | ɢᴇᴏʀɢᴇ ʀᴜꜱꜱᴇʟʟ

I'll always be your girl

DICIEMBRE 2013

El sol cubre de un amarillo anaranjado el parque, pintando de tonos dorados cada rincón de nuestro lugar favorito. George y yo nos encontramos bajo la sombra de un viejo roble, el mismo árbol donde solíamos refugiarnos para escapar de mi casa. Pero esta vez, a pesar de la tranquilidad del entorno, mi corazón latía con una agitación que no podía ignorar.

—Hola —susurro, dejando un pequeño beso en su boca. El inglés y yo no nos habíamos visto solos en días y ya comenzaba a extrañarlo. Cuando nos separamos deja un beso suave en mi mejilla y entrelaza nuestras manos. 

Observé a George, su sonrisa iluminando su rostro mientras comenzamos a caminar por el parque. ¿Cómo podía decirle que las noticias que tenía que compartir cambiarían nuestra relación para siempre? La idea de romper esa paz, esa felicidad que habíamos construido juntos, me llenaba de una angustia abrumadora.

—¿Cómo hiciste para escaparte?  —pregunta George con clara curiosidad. No es un secreto para ninguno lo complicado que es salir de mi casa cuando mi padre está allí.

—Max me está cubriendo, no tengo mucho tiempo —aviso. He estado dándole vueltas a la razón principal por la que tenía tanta prisa por vernos y sé que debo decírselo. Respiré hondo, tratando de encontrar la calma que tanto necesitaba para afrontar lo que vendría a continuación. Aunque temía el dolor y la confusión que mis palabras podrían traerle, sabía que, tarde o temprano, debería decirle—. Fue convocado para la F3.

—¡Oh, eso es genial, Day! —expresa con emoción. Frenamos nuestra caminata y me detengo delante de él aún sin soltar nuestras manos. Nos miramos a los ojos un instante y George parece descifrar lo que mis ojos le transmiten: ya no podremos vernos—. No, no, no, no —comienza a negar.

—George... no hay nada que pueda hacer. Si me esfuerzo en terminar mis estudios podré entrar antes a la universidad y...

—Day, tienes 16. Tienes derecho a vivir tu adolescencia y a vivirla como quieras, no siguiendo a tu hermano alrededor del mundo —discute pero no tiene caso, la decisión ya está tomada.

—Escucha, esto no será para siempre, ¿si? —pongo una mano en su pecho y lo miro con una sonrisa forzada—. Volveré, prometo que lo haré —le digo con convicción.

—¿Esto es lo que quieres?

—Es lo mejor para todos.

—¿Pero qué es lo que quieres?

—No sé lo que quiero, George, solo sé que te quiero a ti y quiero verlos correr a Max y a ti juntos —me sincero.

—Como si tu padre te vaya a dejar alentar por otro que no sea tu hermano —aprieto mis labios. Tiene razón—. Querrá que seas su ingeniera cuando te gradúes.

—Lo sé.

—No es tu sueño.

—También lo sé.

—¿Vas a dejar que siga controlándote hasta que ya no puedas tener el control de tu propia vida?

—No puedo dejar a Max solo con él y lo sabes —George asintió y murmuró un 'lo sé'. El inglés se queda mirándome pero yo no puedo sostenerle la mirada por más que unos segundos. Él sonríe y besa mis mejillas con ternura, tratando de que esta despedida no sea una realmente.

—¿Prometes que vas a volver? —pregunta, tomando mi rostro entre sus manos. George y yo tenemos 16 años, sí, pero lo que hemos vivido este año fue lo primero y lo más real que hice por mí misma alguna vez y dudo que haya otra cosa que se compare en algún momento. 

—Solo si prometes estar ahí cuando vuelva.

—Lo prometo.

—Lo prometo —murmuro con una sonrisa.

—¿Y si te olvidas de mí mientras estás allí? Habrá muchos pilotos que morirían por tenerte en su equipo, y no solo como su ingeniera —dice con una sonrisa juguetona.

—Imposible, no hay manera de que pueda olvidar al chico más molesto del mundo. Además, ¿cómo podría olvidar a mi segundo piloto favorito? —respondo con una risa.

—Bueno, es una promesa. Esperaré lo que tenga que esperar. Seguiré siendo tu segundo piloto favorito y tú...

—Y yo siempre seré tu chica. Siempre —recalco, envolviendo su cuerpo entre mis brazos.

Lo que no sabíamos en ese entonces, es que ninguno cumpliría su promesa.

Holiss, cómo va??
bienvenidas a esta nueva historia llena de odio hacia Jos Verstappen 🤌🏻