Atracción Genética © YOONMIN

015

—Ha pasado mucho tiempo Yoongi.

—Dieciocho años.

—Sí. ¿Cómo has estado?

—Bien.

La tensión en el aire era palpable, Yoongi se sentía extremadamente incómodo por la presencia de su ex. Por un acto de amabilidad Yoongi le ofreció un café y ahora se encontraban en una cafetería que estaba enfrente del súper mercado.

—Me alegro, honestamente no esperaba encontrarte... después de todos estos años. —dijo ella con un toque de nerviosismo.

—¿Quetal tu vida con Namjoon?

—No me casé con Namjoon... terminamos después de unos meses de que me fuera a vivir con él.

Yoongi ya sabía que su ex no se casó con Namjoon –por el cuál le dejó en aquel entonces– aún así preguntó para saber que decía ella.

—Oh, entiendo.

—¿No me preguntarás porqué no me casé?

—No creo que tenga caso saberlo ahora.

—Aún así te lo diré... —la mujer tocó la mano de Yoongi. —Fue por tí, porque no podía amar a otro hombre más que a tí.

Yoongi observó su mano ser acariciada por la de ella, después de tantos años aún seguía teniendo una fina mano. Y ella también, seguía siendo esa mujer hermosa que alguna vez amó. Pero aquello quedó en el pasado, Yoongi apartó su mano.

—Seomin...

—Traté de buscarte pero te mudaste de nuestro departamento...

—¿Nuestro departamento? Te refieres a ese lugar que tanto odiabas porque era pequeño y no tenía muchos muebles. ¿Cierto?

—Yoongi... Después de estos me años me di cuenta que el dinero no me importa, además me puse feliz de que a ti te haya ido bien, te vi en las revistas empresariales y aunque quería buscarte no lo hice porque sentí que te lastimé.

—De todas formas eso ya quedó en el pasado.

—Nunca dejé de amarte Yoongi.

El hombre miró su café semi lleno, y simplemente se levantó del lugar dejando a la mujer hablando sola, no podía soportar el descaro que tenía con él.

La mujer se quedó mirando sonriente a Yoongi, se veía más bueno que en la juventud, y además tenía mucho dinero. Seomin realmente seguía amando a Yoongi.

—Jiminnie... esto me duele más a mi que a tí, pero tenía que darte una lección como amiga tuya.

La rubia sostenía una cámara mientras grababa a Jimin, tenía un pañuelo en su boca para evitar que gritara, aunque la mayoría de los alumnos ya salieron de clases y ya se fueron a sus respectivas casas. Jimin no entendía que estaba sucediendo, él solo fue para buscar el suéter de su amiga y sintió un golpe que lo dejó inconsciente, cuando despertó se vio a sí mismo con su camisa abierta, un pañuelo en su boca y sus pantalones le fueron quitados junto con su ropa interior.

Pero lo que más le dolió fue darse cuenta de que uno de ellos lo estaba penetrando sin piedad ni compasión. Traté de reconocer quiénes eran, son como cinco alumnos que no reconocía.

Y allí estaba su amiga, la que más apreciaba grabándolo mientras era violado por otros alumnos. Ella le sonreía algo satisfecha de ver llorar de desesperación a Jimin. El inmenso dolor que sentía no se comparaba con ver a su mejor amiga ser feliz con su desgracia.

—Si estás preguntándote... el porqué... bueno, tú comenzaste al follarte a mi novio. ¿Creíste que no lo sabía? ¡Leí todos sus putos mensajes! ¡Él te paga para que tengas sexo con él maldito asqueroso!

Jimin se removía llorando y sin poder gritar o decirle que lo lamentaba, que odiaba cada momento en que SeokJin lo fue a buscar y lo contrató como un cliente.

—¿Sabes que es lo más gracioso? Mientras tenías esas notas altas y eras deseado por todos... y yo siendo más hermosa que tú siempre quedó en segundo lugar... pero todo eso terminó ahora, toda la escuela sabrá la clase de zorra que eres.

Jimin hizo un esfuerzo por zafarse, empujó al chico que estaba sobre él y quiso correr pero fue tomado de su brazo y otro chico comenzó a patear su estómago. Sintió como el sabor metálico salía de su boca.

Cuando por fin, dejaron su cuerpo tirado en ese lugar, su amiga les pago a aquellos alumnos que lo miraban con morbo y se reían del Jimin que yacía en el suelo.

No supo cuanto tiempo quedó tirado ahí, pero luego sintió como unas manos lo alzaban y un chico lo abrazaba, sintió algunas lágrimas caerse sobre su rostro y una voz que lo llamaba. Taehyung lo llevó al baño y con un paño limpio su rostro lleno de sangre.

—¡Jimin! Por favor, reacciona. ¿Quién te hizo esto? ¡Mierda!

—Tae... ¿C-como me e-encontraste? —logró preguntar Jimin mientras se sostenía del hombro de Taehyung.

—Un vídeo nos llegó al parecer a todos los alumnos, ahí estabas tú y otros chicos ellos... ahí me di cuenta de que era en el depósito, Jimin, dime quién fue. ¡Fueron cinco, ellos te hicieron eso!

—N-no fue diferente a las veces que tú me follas con tus amigos... —Jimin le sonrió a Taehyung cerrando sus ojitos en una línea.

Taehyung sintió que su corazón se partió en mil pedazos, Jimin tenía razón, él desde hace mucho le había estado haciendo cosas que no sabía que estaban rompiendo a Jimin.

Comenzó a llorar y abrazó a Jimin, le suplicó que lo perdone de mil maneras, pero en el fondo Taehyung sabía que no lo merecía. Jimin sentía que iba a caerse en cualquier momento de no ser porque era sostenido por Taehyung.

—Te juro que no volveré a tocarte jamás, déjame ayudarte ahora.

—Entonces llévame a un lugar Tae, por favor.

Jimin solo quería ver una vez más al señor Min.