Atracción Genética © YOONMIN

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Yoongi tomó la pastilla inmediatamente al despertar, Jimin lo estaba observando. Él siempre tomaba ese medicamento, pero jamás quería decirle que es. Se preguntaba si Yoongi tenía algún tipo de enfermedad, pero no quería inmiscuirse demasiado, aunque debía de aceptar que la relación entre los dos mejoró bastante desde la primera vez que se conocieron.

Si Jimin tenía dudas sobre que Yoongi estaba celoso de Jungkook, esas dudas desaparecieron, el alfa ni siquiera miraba en dirección al omega, a pesar de que siempre estaban juntos, en los últimos meses habían formado una especie de grupo de amigos, entre Taehyung, Hoseok, Jungkook, Jimin y Yoongi.

Así que no era extraño verlos todos juntos en la cafetería. Yoongi trajo a Jimin un postre, sabía que le gustaban las cosas dulces y aunque a él le daban igual, siempre terminaba comprándose uno para dársela a Jimin.

—Lo siento, debo ir al baño —Dijo Jimin y dejó a todos en la mesa.

—Deberías seguirlo si vas a estar así de inquieto por él —Le aconsejó Jungkook a Yoongi.

—¿De qué estás hablando? —Preguntó el alfa.

—Ay por favor Yoongi, no puedes despegar tu vista de él ni por un segundo, te conozco desde hace años y jamás te vi así por ningún Omega.

—Jimin no es un omega. —Dijo algo irritado Yoongi, cómo si eso fuera un obstáculo para... ¿Para qué?

—Pero parece uno, yo también me confundí la primera vez por su aroma tan tenue, jamás ví un alfa tan delicado y bonito como él.

—Él no está interesado en tí. —Decretó fuertemente Yoongi, su aroma se volvió más espeso, cómo si quisiera marcar algo... su territorio.

—¡Hey! Tranquilo amigo. —Interrumpió Hoseok. —Todos saben que Jimin no está interesado en Jungkook ni en nadie, no necesitas ponerte así.

—Siempre fuiste muy posesivo con Jimin, cuando lo llevaste a vivir contigo no dejaste que recibiera visitas —Dijo Taehyung.

Pero Yoongi jamás llevó a Jimin a vivir consigo. Pero muy en el fondo de su mente veía a un Jimin acostado en una cama con el rostro lleno de moretones.

Yoongi se sintió mal, su estómago se revolvió completamente, estaba apunto de vomitar y se echó a correr en el baño, su mente estaba llena de un Jimin llorando, débil y lastimado.

Pero antes de llegar al baño vio a Jimin en los brazos de un alfa, de ese maldito profesor SeokJin, Jimin estaba algo débil y el hombre lo estaba llevando a algún lugar. No sabe cómo pero lo único que recuerda fue cuando su puño impactó sobre el rostro del profesor y le quitó a Jimin de sus brazos.

—¡No vuelvas a tocarlo! ¡Tú fuiste el culpable de que esos estudiantes lo violaron y golpearon! Jamás vuelvas a acercarte a Jimin. —Le gruñó y se llevó a Jimin consigo.

SeokJin se quedó en el suelo atónito y entonces sintió un aroma suave, miró a un chico que venía a ayudarlo a levantarse. Emanando un dulce aroma, tratando de consolarlo.

—No debe escuchar lo que dice Yoongi profesor —Dijo Jungkook arrastrando a SeokJin a una de las clases vacías, cerró la puerta con seguro antes de volver a su profesor.

SeokJin ya recordaba el nombre del chico, es Jungkook, también su alumno y compañero de Jimin. —Me lo merecía, él tiene razón. —Dijo sin darse cuenta, pero continuó, porque estaba llegando a su límite y necesitaba desahogarse con alguien. —Yo fui el culpable de todo lo que le pasó a Jimin... por mi culpa él... —Sus ojos se llenaron de lágrimas.

—No es el único, yo le hice cosas imperdonables, aunque sabía que él no quería... solo pensé en mi y en darme placer, no sabe el asco que siento de mí desde que... —Se detuvo a mitad de sus palabras.

—Lo recordaste. —Terminó SeokJin.

—Sí.

—¿Jimin lo sabe? —Preguntó.

—No lo creo, he estado observando todo sobre él, a veces parece estar perdido en sus pensamientos queriendo encontrar algo, queriendo recordar pero creo que aún no lo ha hecho.

Jungkook acarició la herida en SeokJin, era un rostro muy hermoso, era una pena que tuviera un moretón ahora.

—¿Qué mierda es esto? ¿Cuántos somos los que lastimamos a Jimin? Me estoy volviendo loco, todo es una mierda... yo...

Jungkook se apresuró en abrazar al alfa. Trataba de soltar las más suaves feromonas, trataba de consolarlo.

—Lo que fuimos en el pasado no lo podremos cambiar, lo que importa es lo que somos ahora. —Dijo y lo miró fijamente, ese alfa era tan hermoso, se veía tan triste y herido.

Y a Jungkook le gustó eso. Acercó sus labios a los del alfa y lo besó lentamente, saboreando esos labios carnosos. Y sabía que lo que estaba haciendo le estaba gustando a su profesor, porque sintió un bulto sobre su pelvis, y el aroma de SeokJin se volvió más fuerte, las grandes manos del alfa se aferraron a su cintura.

—Jungkook... no podemos —Susurró el alfa.

—Shh, tú necesitas un cuerpo que te caliente... y yo estoy dispuesto a darte mi calor. —Fue lo último que dijo, antes de bajar por el cuello del alfa.