Eres Un Verdadero Cretino Tadano

Aun hay algo de bondad en ti

Makoto estaba en una elegante casa, con paredes pintadas de rojo, alfombras de ese mismo color, una gran ventana con una hermosa vista al exterior, pero esos bellos arboles, ese colorido césped, esas flores con un color vibrante y vivo se veían opacadas por un cielo oscurecido, un aura fría y desolada, una inerte sensación de crueldad y malicia en su estado mas puro, una gruesa niebla que escondía los oscuros y macabros secretos de aquel bosque, que en principio parecía ser uno común y corriente. 

Las paredes de aquella cosa que difícilmente se le podrían llamar hogar, eran sofocantes, aprensivas, deprimentes, pero sobre todo, lograban darle todavía mas peso al monstruo que habitaba en aquel tétricamente sutil lugar. Ese Monstruo que era la representación física de la decadencia humana, uno que en particular, podría hacer que incluso el mas salvaje y degenerado bastardo temblara del miedo, que gritara desesperado por ayuda, que incluso bajo sus perspectivas ateas... Debía ser un demonio que vino a traer la desgracia sobre todos nosotros... Sin excepciones. 

???: Así que has venido a pedir misericordia en nombre de tu... Deficiente y rastrero amo... Ustedes ya deberían saberlo, no voy a perdonar a unas sabandijas solo porque intenten apelar a mi empatía... Debería haber venido el mismo, si es que quería intentar dialogar.-

Katai: Se... Se que esto no fue mas que una maldita tontearía... Pero también se que es inútil intentar detenerte, el no se dará por vencido, prefiere mil veces morir antes que dejar que ganes.- Makoto tenia una apariencia espantosa, demacrada. El veía con una mirada vacía y triste a la silueta que estaba al frente de el, dándole la espalda de manera despectiva.-

???: Entonces... ¿Por qué viniste hasta mi?, si ya sabias con antelación que esto era una tontearía.- la sombra se dio la vuelta, encarando al rubio, con una expresividad tan vacía que a cierto punto... Era escalofriante.-

Katai: ¿Qué otra opción tenia?, igualmente ibas a matarme... Prefiero hacer este ultimo, estúpido, carente de lógica y miserable intento por al menos intentar salvar a mi hermana, a Hitomi... A Tadano.- una sonrisa desgarradora se asomo de los labios de aquel monstruo, pero incluso con esa horripilante sensación en el pecho, Makoto seguía con ese rostro medio muerto y carente de cualquier emoción.-

???: Lo siento... Pero el destino de todos ustedes a sido sellado, ya no tienen escapatoria... Quizás con tu muerte Tadano logre reflexionar un poco... Que Se de cuenta que jamás podrá ser como yo.- Katai sonrió, una sonrisa que no reflejaba absolutamente nada, como si ya no fuera capas ni de sentir miedo.-

Katai: Ya veo... Una ultima cosa.- soltando un tranquilo suspiro, el rubio recordó por ultima vez a sus amigos, antes de mirar al techo, imaginando que podia ver atreves de el, hacia un hermoso ocaso.- ¿por qué haces todo esto?, ¿qué ganas tu haciendo... Lo que haces?.-

???: Veraz, solamente me parece divertido ver a personas como tu y Tadano perder toda esperanza, sucumbir al miedo, a la desesperación, a la impotencia, al terror, al pánico, ver como explotan en ira al saber que si tan solo no me hubieran conocido... Todo estaría bien, para que al final todas esas hermosas emociones desaparezcan, dando paso al mas frio y hueco vacío.-

Katai: Hummm, ya veo, me imaginaba una respuesta similar a esa.- la sombra sacaría algo de su bolsillo.- no me preocupo, al final de todo tu serás la miserable que se pudrirá en el infierno... Yo... Yo creo que volveré a ver a todos mis amigos... A Ai, en la otra vida.- la silueta lo apunto con su arma.-

???: Katai, no existe una vida después de la vida, luego de esto solo será oscuridad... Jamás los volverás a ver... esa es la mejor parte de toda esta orquesta, podrías haber pasado tus últimos momentos con ellos, pero decidiste venir a que te mataran como un perro, dejando sola y desamparada tu hermana, dejándola a su suerte en el infierno que esta por venir... Eres un cobarde, al igual que Tadano.-