WITH ME || Manjiro Sano

capítulo 13

— Muchas gracias.

— Puedes volver cuando quieras.

Shinishiro y Emma se despidieron de mí a la mañana siguiente. Manjiro seguía durmiendo, eso me dijo Emma

«Estoy segura que no quiere hablar conmigo»

Simplemente no le dí más vueltas al asunto y decidí irme temprano. No puedo obligarlo a despedirse de mí si no quería

Primero pasaré por el centro comercial y compraré un nuevo teléfono, el mío ya no sirve, no me tomará mucho tiempo elegir y comprar otro.

Ya que era temprano todo estaba muy vacío, no habían muchas personas caminando, solamente podía ver una que otra pareja entrando a las tiendas.

Elegí un nuevo teléfono y lo compré con la tarjeta que me dió Johan. Era la primera vez que lo usaba... Y posiblemente la última.

Mientras caminaba hacía la salida con un teléfono nuevo alguien pasó a mi lado y yo me quedé quieta al reconocerlo.

Sin poder creerlo me dí la vuelta viendo la espalda del chico que caminaba rápidamente con unas compras en las manos.

¿Cómo es que no lo ví?

Cabello rubio platinado hasta los hombros, ¡Si es él!

— ¡SANZU!

Él se exaltó y buscó a la persona que estaba gritando su nombre en el centro comercial.

Sus ojos se encontraron con los mío, él frunció el ceño confundido mientras yo salí corriendo hacia él.

Cuando llegué a su lado lo miré con una sonrisa, me sorprendí demaciado al ver que las cicatrices en su boca habían desaparecido, es mejor para él pero voy a extrañar esas cicatrices.

Después de incontrolables peleas me había encariñado con él.

Me dió vergüenza haberme burlado de sus cicatrices ahora que lo pienso, él fue quién tuvo que soportarme incluso más que el resto.

Sanzu me enseñó esgrima, me enseñó a manejar autos y motos, también tuvo que estar al pendiente de mí los primeros años que estuve al lado Manjiro, todo por orden de su Rey.

Eso no era justo para él. Tuve que haberlo valorado más

— Sanzu... — Murmuré sintiendo mis ojos empañarse de lágrimas.

Sanzu era tan leal que terminó con su vida cuando Manjiro murió, su muerte fué el quiebre de mi cordura y lo que me permitió seguir en pie a pesar de estar totalmente destrozada.

Él no me habló solo me miraba con seriedad y confusión.

No puedo abrazarlo, tengo que aprender a ser menos efusiva o terminaré en otro problema como el de Izana.

Él me vió fijamente por unos segundos y luego se dió la vuelta para irse. Me quedé parada mientras él se alejaba

— Vaya... parece que Sanzu solía ser muy frío a esta edad — Murmuré sonriendo resignada, no puedo obligarlo a quererme o a hablarme si es que no quiere — Es muy diferente al Sanzu extrovertido que conocía.

Decidí dejarlo así por el momento, estoy segura que ya habrá oportunidad para conocerlo mejor.

Cuando llegué a mi casa me tomé una ducha y me cambié de ropa.  Le devolveré la ropa a Emma despues de que esté limpia.

Hoy en la noche iré con izana y pondré punto final a todos ese lío, también tengo que hablar con Manjiro y contarle toda la verdad.

Ya no quiero que se lleve más sorpresas, me aseguraré de que así sea.