WITH ME || Manjiro Sano

capítulo 46

Mi boca se abrió repetidas veces más no pude emitir palabra alguna. Con los ojos llenos de lágrimas solo pude apretar los labios para no soltarme a llorar.

— Manjiro... — Murmuré tratando de contener mis emociones. Fué imposible no quedarme sin palabras — ¿Lo dices encerio? ¡¿Realmente?!

— ¿Y cual es tu respuesta?

Sus ojos me miraban expectantes, el brillo en ellos era encantador.

Mi respuesta...

— Si... — apenas pude decir poniéndome de cuchillas con él.

Manjiro suspiró aliviado, su rostro había permanecido un poco pálido hasta que escuchó mi respuesta. Sacó el anillo de la cajita y me pidió la mano.

Con cuidado colocó el anillo en mi dedo anular y finalmente besó el dorso de mi mano antes de soltarla.

Observé el precioso anillo de oro blanco con pequeños diamantes blancos alrededor de un corazón hecho de zafiro. El brillo de tales piedras preciosas me dejaban sin aliento.

Ya está, acepté. Me voy a casar con Manjiro, nosotros dos vamos a... Ay por Dios, es cierto.

— Disculpa por lo que haré a continuación —  mencioné sintiendo la adrenalina recorrer mi cuerpo.

— ¿A qué te refiere-...?

— ¡KYAHHHHH! — grité como nunca levantando las manos al aire — ¡ME VOY A CASAR! ¡ME VOY A CASAR! ¡FINALMENTE HAHAHA!

Empecé a dar saltitos de alegría con el estómago lleno de mariposas revoloteando por doquier, las lágrimas empaparon mi rostro como si fuera un diluvio lleno de emociones mientras seguía gritando y riendo.

«Si esto es un sueño nunca me despierten»

— Finalmente... — afirma Manjiro con ojos llenos de lágrimas al presenciar mi arrebato de felicidad. Lo abracé fuertemente dando vueltas con él.

Escuché los aplausos de las personas y tuve que separarme de él. Me sonrojé al notar como todos me observaban con sonrisas de alegría así que me limpié las lágrimas rápidamente.

— ¿Esto es real? — susurré aún sin creerlo a pesar de tener el anillo en mi dedo. Mi corazón golpeaba fuertemente en mi pecho.

—  Lo es — Manjiro trataba de calmar mis nervios acariciando mi rostro.

— Ah... Debo calmarme o empezaré a gritar de nuevo — mencioné con la mano en mi pecho — te juro que estoy temblando.

Manjiro se ríe ligeramente.

— Solo no te olvides de respirar.

— No prometo nada Hahaha — observé nuevamente el hermoso anillo — Es hermoso, me encanta... Gracias.

— Soy yo quién está agradecido — dejó un beso en mi frente — gracias por aceptarme.

Sonreí más que feliz acercándome a él y besando sus labios con mucha emoción. En todo momento solo podía ver mi anillo y sonreír como tonta por lo feliz que me hacía saber que finalmente voy a casarme con él.

Pero claramente no iba a quedarme con la noticia para mi sola. Una boda que en Bonten nunca creí que sucedería...

Al final terminé buscando a todos los que consideraba mi familia para que supieran la noticia primero, incluso primero que mi propio padre.

Estoy segura que si tuvieran recuerdos al igual que yo ellos empezarían a decir cosas como "Ya era hora" "Finalmente" "Ume ya no se quedará solterona" y todo tipo de cosas mientras me felicitan.