La oscuridad.

Capitulo 20

NARA JUNIER

Atravesé sin problemas las luces del portal, lo primero que debía hacer era desatar a Samuel.

Fui corriendo hasta llegar a él.
Sus golpes eran bastante graves pero estaba consciente; deshice el el amarre de sus manos.

-Ju...ju...Junier.- Apenas podía levantar la cabeza.

-Soy yo amigo, te vamos a sacar de aquí.- Le ayudé a levantarse pasando su brazo por mis hombros y lo llevé al límite del portal.

-Junier Al...- Enseguida saqué el colgante y pasé a Samuel al lado opuesto.

-Espera mi señal y cuando la veas, corre lo más rápido que puedas hacia aquellos árboles.- Apunte hacía donde se encontraba la persona que nos acompañó.

Samuel asintió y se apartó del peligro de la pelea sentándose a varios metros en la hierva.
Yo en cambio debía de seguir con el plan, di media vuelta en dirección a Alma.

Al llegar a su lado vi que estaba en trance.

-Alma estamos aquí, contigo.- Ella estaba escuchando, sabía que estaba escuchando.

-Tú eres más fuerte que ellos, siempre has sido mas fuerte que todos.- Me agaché a su lado.

No se movía, solo recitaba frases sin cesar.

-Recuerdo una vez, cuando apenas eras una niña; estabas jugando junto a tu hermana al lado de un río algo profundo. Te despistaste un momento y cuando te diste cuenta Carol había caído dentro de él; la corriente era fuerte y tu solo eras una niña pero...saltaste aún sabiendo que podrías ahogarte. No lo pensaste ni un momento, nadaste hasta ella, pero la corriente era demasiado fuerte y os arrastro a las dos; había rocas en el río y Carol se golpeo la cabeza con una de ellas, estaba inconsciente y aún así no la soltaste, sacaste fuerza de donde no quedaban y por muchas rocas que te golpearon no dejaste de luchar y pudiste salvarla al igual que te salvaste tu; era tu hermana, tu familia y no la abandonarías. Alma nosotros somos tu familia y nunca te abandonaríamos no nos abandones tu.- Su mirada cambió, las lágrimas cayeron por sus mejillas.

Había dejado de recitar frases, era ella, estaba de vuelta.

-¡¡¡NOOO!!!- Nelkhael gritó desde la distancia y el suelo se abrió a la mitad.

Un temblor hizo que todos cayéramos de inmediato mientras una gran grieta se abría paso entre en el bosque.

-¡¡¡SAMUEL AHORAAAA!!!- Miré a Samuel que enseguida se levantó y aunque cayó varias veces al suelo siguió hasta llegar a los árboles.

-¡¡¡ALMAAA!!!- Estaba aferrada al borde de la tierra, su cuerpo pendía en el aire sobre la gran brecha que se había creado.

Me lancé hacia ella y pude agarrar su mano.

-¡¡¡JUNIERRR!!!- Grito agarrando al fin mi mano.

-¡¡¡SUJETATE FUERTE!!!- Pudimos agarrarnos los dos y con mucha fuerza la traje a mi lado, enseguida corrimos fuera del portal ya que los bordes de la grieta se estaban desmoronado y piedras enormes caían al vacío.

-¡¡¡NO DEJARÉ QUE ESTO ACABE TAN RÁPIDO!!!- Nelkhael se abalanzó sobre nosotros y logró herirnos, había hecho un ataque tan preciso que tanto Alma como yo habíamos sido herido en el brazo derecho.

Desde el suelo retrocedimos hasta que nuestras espaldas dieron con unas rocas.
Azacel se abalanzó sobre Nelkhael pero esquivó el ataque y logró herirlo en el abdomen.

-¡¡¡CREIS QUE UNA PANDA DE ESTÚPIDOS COMO VOSOTROS IBA A VENCERME!!!- Me coloqué delante de Alma para poder protegerla pero Nelkhael me apartó de una patada que me rompió las costillas.