Estúpido Weasley. [RON WEASLEY]

Capítulo 28

Zorra

¿Tenía miedo? Sí.

¿Estaba paranoica? También.

¿Pero estaba emocionada? Obviamente.

¿Todo esto tiene algún sentido? En parte.

Todo esto tenía sentido. Estaba aterrada por encontrarme con Sirius Black. No obstante, ahora mismo estaba en un banquillo de los vestuarios del campo de quidditch, esperando a que todos mis compañeros terminasen de vestirse para tener una charla "motivadora" con Oliver Wood.

Antes de entrar al vestuario, Ginny se había lanzado sobre mí, tirándonos a las dos al suelo. Me besó las dos mejillas y dijo que confiaba en nosotros para ganar la Copa de Quidditch. También me amenazó diciendo que si perdíamos nos asesinaría cruelmente.

En cambio, Nev me dio un abrazo y me deseó mucha suerte. Me dijo que ganaríamos seguro.

Yo me había cambiado de ropa muy rápido, así que me sobraba mucho tiempo.

Estaba repasando tácticas en mi cabeza. Había entrenado un montón, teníamos que ganar.

Wood estaba dando vueltas frente a mí. Él era el único que había llegado antes que yo. Sinceramente, creo que Wood se quedó a dormir en el campo.

Wood ama más el quidditch que a sus padres.

Cuando terminaron de salir todos mis compañeros, todos vestidos con el mismo uniforme rojo, Wood se puso frente a nosotros y pasó la mirada por cada uno.

Me temblaban el cuerpo entero. No podía esperar a salir al campo.

—¡Escuchadme, leones!— rugió nuestro capitán— ¡La táctica va a a ser la siguiente!

Wood nos explicó cómo movernos, qué hacer en caso de que pasase una u otra cosa, debilidades de las serpientes, y muchísimas cosas que intenté retener. Aunque, a causa de los nervios, todas esas cosas se me olvidaron según Wood comenzó a darnos ánimos.

—¡Vamos a ganar esto como sea, leones!— tenía una ancha sonrisa en la boca y estaba muy animado— ¡Aunque, en el remoto caso de que perdamos, no solo perderéis el juego!

—¿Eso es una amenaza?— preguntaron los gemelos al unísono.

—¡Sí!— admitió el capitán— ¡Vamos a salir ahí fuera y le vamos a dar una patada en el culo a todos y cada uno de los integrantes del equipo contrario! ¿Oís?

Todos asentimos a la vez y Wood puso una mano en el centro. Cada uno puso la suya encima de la de la persona de al lado.

—¡VAMOS, GRYFFINDOR!— vociferamos a la vez todo el equipo.

Wood nos dio una palmada en la espalda a cada uno. Salimos todos juntos, escoba en mano.

El palco de Gryffindor estalló en vítores y aplausos. Yo busqué entre el público a Nev y Ginny. Esta última se había escrito "GRYFFINDOR" en la frente, mientras que Nev nos daba ánimos a gritos. Yo les saludé con la mano.

Wood y el capitán del equipo de Slytherin se acercaron a la profesora, que les dijo las normas, y los demás tomamos posición en el campo.

Lanzaron todas las pelotas al aire y yo salí disparada hacia la quaffle, que cogí rápidamente.

Los bateadores del equipo contrario no dudaron al lanzarme las dos bludgers. Una la esquivé y la otra la alejó George de mí de un batazo.

Vi a Angelina a mi diagonal izquierda y le pasé la quaffle cuando vi que las serpientes se abalanzaban sobre mí. Lo que no esperaba era que dos de ellas me diera una patada en la escoba por cada lado, haciéndome volcar.