Otra etapa
________________Si hay algo peor que ser padre primerizo de un hijo, es ser padre primerizo de dos.
Gemelas, tuvieron un par de gemelas alfa. El día que se enteraron, todas las preocupaciones y responsabilidades se multiplicaron por dos, pronto el espacio se haría más pequeño, también se requeriría más tiempo y dedicación.
Criar un hijo era difícil, criar dos sería un desafío. Sin embargo, la facilidad con la que Akaashi hacía las cosas siempre ha logrado perturbarlo en el buen sentido. Él es tan naturalmente amoroso que duele verlo conquistar con sonrisas y cosquillas los corazones de sus pequeñas hijas, por otro lado, a Bokuto le da miedo abrazarlas con mucha fuerza y cometer un error imperdonable.
También le da miedo la responsabilidad que conlleva, para una persona habitualmente desenfocada del momento, el mayor temor actual que puede enfrentarse es dejar a sus hijas en el auto y olvidar que están ahí.
Akaashi siempre se encarga de regañarlo.
Bokuto tiene veintisiete años, casi veintiocho y sigue sintiéndose como un niño pequeño cuando Akaashi lo regaña tirando reprendedor pero suavemente su oreja.
Poco a poco pasan los meses y llega el primer cumpleaños de las gemelas, para esas fechas de la vida de ambos muchas cosas han pasado, el MBSY está mejor que nunca, Akaashi está volviendo a trabajar después de su licencia de maternidad y están enfocándose en ajustar sus horarios lo mejor posible para no tener que contratar a una niñera por muchas horas.
Ambos han crecido, con eso también el amor entre ellos, el cual se ha mantenido a pesar de todo, fuerte y contundente con los cimientos firmes e inamovibles tal como las raíces de un viejo y gran árbol. Es poco decir que la manera en la que se conocen el uno al otro es incomparable en cualquier aspecto.
Alguna vez fueron niños, niños tímidos que robaron ropa del armario del otro, niños tímidos que miraron fuegos artificiales juntos una noche de festival, niños tímidos se conocieron en un gimnasio en aquellos días de instituto y sintieron que algo bueno podía salir de ahí.
Ahora ambos son adultos que han pasado muchas cosas, tal vez no tantos baches como otras relaciones, ni peleas horribles que parecen no tener solución, pero si han tenido dificultades en las que se afirmaron en el otro durante el camino.
El tiempo vuela cuando haces lo que amas, con quien amas y amando cada paso del camino que recorres.
Con el pasar de los meses Bokuto ha aprendido un par de cosas. Primero; los niños no siempre quieren divertirse y comer, a veces tienen que cambiarse el pañal, segundo; odia cambiar pañales.
Otras cosas son las experiencias y los momentos que han florecido en su corazón, el espacio que hay en el ahora es inmenso y abarca cada rincón de su pecho donde habitan los tres pequeños amores de su vida.
Él ama su vida.
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Bokuto tiene treinta y cuatro años cuando se retira del vóleibol profesional y consigue trabajo en la academia Fukurodani como entrenador de vóleibol.
Muchas cosas han cambiado en estos años, y con la llegada a la vuelta de la esquina de su tercer hijo, ya viene siendo hora de buscar estabilidad y un lugar fijo.
Se mudaron a una casa más cercana al centro de la ciudad, en un vecindario agradable y con una distancia amable a jardines infantiles y escuelas primaria.
Este año, las gemelas estarán cumpliendo ocho y su hermano está, con la mejor de las suertes, naciendo a finales de invierno.
Es una noche fría, la chimenea está prendida y Akaashi está rendondo como una sandía con sus hijas sentadas una a cada lado tratando de sentir las patadas de su hermanito por venir, ha pedido la licencia por maternidad y hace una semana que está acoplado a la casa organizando lo mejor posible las cosas para la llegada del bebé.
Bokuto mira cariñosmente a su familia, llama a las niñas a dormir y las acuesta con un beso de buenas noches. Para ese punto, Akaashi ya está desmoronado en la cama buscando que ver en la televisión, así que se dirige al cuarto principal encontrando a su esposo extendido como una estrella de mar sobre las sábanas mirando el video de su boda.
Se casaron un año y medio después tener a las gemelas con el plan en mente de tener la vida más tranquila y equilibrada para esas fechas, recuerdan todo como si fuese ayer, el padre de Bokuto llorando desconsolado mientras las madres de Akaashi y Bokuto se comprometían a cuidar de las pequeñas durante la luna de miel, recuerdan haber estado nerviosos por dejarlas solas y también haber confiado lo suficiente como para disfrutar la ceremonia y la posterior luna de miel.
La misma noche que volvieron decidieron que renovarían sus votos regularmente, ansiosos de revivir el momento.
Hoy un par de años después ambos recuerdan con cariño ese momento.
La vida se ha encargado de muchas cosas con el paso de los años, ha encontrado el momento justo para todo, brindándoles más que nada una hermosa y perfecta vida juntos.
Porque así se inicia otra etapa más, no la primera, ni claramente la última. Bokuto y Akaashi van a perseguirse infinitamente, en cada mundo, en cada universo y en cada dimensión. No importan los años ni la distancia, sea como amigos, amantes, esposos, prometidos o rivales.
Siempre estarán juntos, porque nunca está demás decir lo perfectamente bien que se siente estar uno al lado del otro.
Fin.
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Holi :3
Gracias por la espera +-+
Jueves 14 de diciembre.

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Perfect | BokuAka
FanfictionEl amor a primera vista es un fenómeno bastante peculiar, dos miradas se encuentran, dos almas se cruzan y dos corazones se enamoran en un fragmento efímero de segundos. Bokuto es el alfa destinado de Akaashi, Akaashi es el omega destinado de Bokuto...