⭑𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 35⭑

4.8K 225 21
                                    


clases de conducir

—¿Y ahora cambiaria de marcha?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Y ahora cambiaria de marcha?

—Si no te quieres ir como una tortuga en un autopista, sí.

Estábamos enseñando Pedri y yo a Pablo a conducir con el videojuego de Formula 1.

—Ey, Alonso me acaba de adelantar.

—Tu no prestes atención a la carrera, solo sigue el circuito.

—Pero quiero ganar.

—Pablo.- le reñí, porque habia empezado a acelerar y justo cuando pasó una curva se estrelló.

—Y por eso todavía no tienes el carnet.- se rio Pedri de él.

—¿Si te encuentras a Fernando por la calle le retas a una carrera?- le dije enfadada, ya que ahora tenia que empezar todas las vueltas de nuevo.

—Pues si.- dijo él.

—Yo le pediría que me llevase a Asturias.- dijo Pedri. Ambos le miramos.- Mi madre dice que se come muy bien. Y que hay croquetas de picadillo. No se lo que es eso, pero suena rico.

—Vamos a dejar de lado a Asturias y centrarnos en que Pablo apruebe hoy de tarde el examen práctico de conducir.

—Ya sabes, hermano. Si te encuentras con el Nano, no intentes ser igual de rápido que él, y si te da tiempo pídele la receta de las croquetas de picadillo.

—Si, ya. Y el técnico me suspende.

—Pues trapichea con la receta de las croquetas del Nano, y que te apruebe.

—Oye, pues suena bien.

—Solo falta que te encuentres con Alonso.

—PODEIS DEJAR DE HABLAR DE FERNANDO ALONSO.- los dos se callaron a mis gritos.- Gracias. Ahora escucha. Lo mejor es que no te pongas nervioso y hazlo como sepas.

Pedri y yo le llevamos a la autoescuela y esperamos en el mini cooper de este, hasta que Pablo volviese.

Cuando le vimos llegar Pedri abrió el coche y Pablo se sentó en la parte trasera conmigo al lado. Ambos le miramos esperando a que nos diga algo.

—Tengo malas noticias. Pedri... no me vas a llevar más al entrenamiento.

—Creo que voy a llorar de tristeza.- dijo el canario y yo salté a abrazar a mi novio.

—Enhorabuena.

—No ha sido mérito mío. Fue todo porque no me encontré a Fernando Alonso.

—¿Inauguras el camino de vuelta?

—Pedri, piensa en lo que dices. Que quedas sin coche.- me reí yo.

¿𝑁𝑂 𝑇𝐸  𝑆𝐴𝐵𝐸𝑆  𝐿𝐴𝑆  𝑇𝐴𝐵𝐿𝐴𝑆? pablo gaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora