✓ |Halley.| Teen Wolf.| Liam Dunbar.

31| Vacío.

Episodio Treinta Y Uno:

─¿No?─. Repitió la chica, sorprendida por las palabras de su Alfa. Liam se acercó a ambos, aplastando suavemente el hombro de la muchacha, tratando de calmarla.

Sentía su enojo en el pecho como si fuera propio. Y podía asegurar que, en cualquier momento, perdería el control.

─Halley, está demasiado débil. La mataría─. Expresó en voz alta. ─No sabemos qué le hace el mercurio, o si realmente es mercurio. Te ayudaré a salvar su vida, pero no así─. Ella le dio una mirada confundida, mostrando que en realidad era solo una niña asustada.

─A mí me salvo─. Trató de recordarle.

─Era distinto. No estabas agonizando─.

─Tenía un corte de espada Oni en el abdomen, Scott─. Alzó su blusa, dejando ver la cicatriz que aún tenía.

─Ella no lo soportará. La voy a matar. Tiene que haber...─. Comenzó a jadear, sintiendo que el aire le faltaba. Theo le lanzó uno inhalador, que el Alfa tomó su medicamento. ─Hay otra manera de salvarla─. Aseguró.

─No sé mucho sobre las estadísticas de sobrevivir a una mordedura de Hombre Lobo, pero sin duda ella no sobrevivirá─. Theo apareció con el cuerpo de Hayden entre sus brazos, examinando en silencio al Beta que parecía nervioso y ansioso. ─Tenemos que hacer algo─. Pidió él.

◎

Melissa comenzó a vendar la mano de Halley con una mueca de preocupación, tratando de si quiera arreglar uno de los tantos problemas que habían en ese momento. Llevaba desde la noche con un dolor agudo en una de sus manos, tal vez por darle con mucha fuerza el golpe a Scott.

La muchacha soltó un jadeo de dolor al sentir como la venda se apretaba a su mano inflamada. Ni siquiera bofetadas parecía poder dar bien.

Liam al instante detuvo la muñeca de la señora McCall, oliendo a ansiedad. Comenzaba a afectarle el no poder hacer nada para ayudarle a Halley. ─La estás lastimando─. Le detuvo él.

─Y tú me estás lastimando a mí─. El Alfa alzó el rostro ante la mirada que su madre le daba al Beta, quien boqueó antes de soltar la mano de la mujer.

─Lo siento...─. Se disculpó en voz baja, avergonzado.

─Liam, estoy bien─. Trató de calmarlo la chica, tratando de sonreírle a pesar del dolor en su mano.

¿Podría estar rota?

─Estamos aquí para salvar su vida─. Señaló a Hayden, que llevaba una intravenosa conectada en el torso de su mano. ─No para matarnos entre nosotros─. Halley alzó el rostro ante sus palabras.

Era terapia de quelación, quitaba los metales pesados de la sangre, pero dañaba los riñones. Y Hayden solamente tenía uno debido al trasplante de hacía unos años.