Como sirena.
~•~
El sabía como acabar con mis temores, tal vez ese fué el poder que tuvo sobre mí, porque nunca entendería aquellos sentimientos que aclamaban por el.
《Mierda.》
La maldita alarma no sonó justo hoy.
Tengo un maldito viaje escolar y el autobús sale en 10 minutos.
Entro al baño, me saco la blusa y el short lo más rápido que puedo, me meto bajo el agua sacudiendome al notar lo helada que está.
Ojalá muriera de hipotermia.
Salgo enseguida envolviendo la toalla alrededor de mi cuerpo diminuto y entro nuevamente a mi cuarto. Mi maldita ropa negra está sucia y solo me queda un estúpido vestidito amarillo de flores.
—Que tonto. —Deslizo mi ropa interior negra lo más rápido que puedo y justo en ese momento mi tablet suena.
—Adivino, no sonó tu alarma. —Ríe Danna detrás de la pantalla.
—Estúpida tablet del gobierno. —La risa de Danna aumenta mientras yo termino de ponerme los zapatos.
—Tonta, ¿Demoras?
—Falta mi cabello y estoy lista, la mochila ya la arreglé ayer. —Tomo la crema de peinar, mi cepillo, comienzo a peinarme y a acomodar mis rizos.
—Pasamos por tí en 5 minutos. —Me volteo como exorcista y me acerco a mi tablet.
—¿Cómo que pasamos?
—Olvidé comentarte eso, ups.
—Voy a matarte. —Murmuro y enseguida ella cuelga dejándome con la palabra en la boca.
Termino de sacudir mi cabello y justo en ese momento suena el pito de un carro llamando mi atención, haciéndome salir apresurada.
Acomodo mi vestido y me quedo parada en el umbral de la puerta cuando bajo a la salida y noto lo que estaba pasando.
—Que madrugadora. —Y ahí estaba el, con su estúpida sonrisa detrás del volante de un auto negro.
Soy mala con los nombres de autos así que se va a llamar, "El señor de la noche"
ESTÁS LEYENDO
Una Ilusión
Teen FictionAmar también es dejar ir, pero... ¿Dejarías ir al amor de tu vida?