Siento nervios, no sé por qué. Ahora que lo pienso debí negarme. Caín no puede vivir solo, hablaré con mi papá sobre esto, no creo que esté bien que esté por su cuenta, si papá estuviera con él otra cosa sería.
-Vlad, cariño.-esa voz.
Al voltear, Liam se dirigía hacia mí con una tierna sonrisa.
-hola.-sonreí y me acerque para poderlo abrazar. Su calidez es impresionante, su aroma era el mismo que recordaba día tras día.
Joder, realmente me hubiera gustado quedarme con él en lugar de con mi padre, pero ni modo, ese fue su acuerdo.
-¿En donde está Caín?-pregunte al separarnos y no verlo a su lado.
El señaló hacia atrás, volteé y pude verlo. Seguía igual de pequeño y delgado, su piel más blanca que la mía, sus cabellos marrones ahora se veían más oscuros, lo cual lo hacían ver mucho más lindo.
Él se acercó un poco tímido, al estar frente a mí agachó la cabeza, como si tuviera miedo de mirarme a la cara.
Mi nariz se agudizo, su aroma había cambiado un poco, ahora olía a fresas.
-hola.-su voz era suave, sus mejillas estaban levemente sonrojadas, haciéndolo ver adorable.
-hola, déjame ayudarte con las maletas.-me acerque y pude notar un sútil temblor en su cuerpo.
-muchas gracias.-
Sonreí.-no es nada. ¿Quieren comer algo antes de ir al departamento?-
-yo si tengo hambre.-se apresuró a decir mi papá, observó a mi hermano y le tocó suavemente el hombro.-¿Tú tienes hambre, cielo?-
Caín sonrió mientras se abrazaba a si mismo, asintió suavemente.-tengo un poco de hambre. El camino fue un poco tedioso.-
-vamos entonces.-
* * *
Una beta nos atendió con más amabilidad de la que esperaba, odio que la gente trate de llamar la atención de esa manera, amiga, si lo haces para coquetear déjame decirte que me gusta mucho más que sean ellos mismos.
La beta tomo nuestra orden, y antes de irse me dedicó una enorme sonrisa, a lo cual respondí de la misma forma, por mera cortesía.
-al parecer mi hijo alfa tiene a muchas señoritas detrás.-comentó Liam en cuanto la beta se fue, inmediatamente miré a mi papá.-a decir verdad no me sorprendería que tuvieras pareja.-
-te equivocas papá, soy soltero.-
La cara de papá reflejo sorpresa, una que claramente no pudo esconder.-¿En verdad?-
Sonreí ante la incredulidad en sus palabras.
-no busco una relación ahora, no podría con la empresa y mis deberes, además, hay gente que se acerca solo por interés.-respondí con la verdad, pero pese a eso pude notar su molestia, sus feromonas eran un poco amargas, sin darse cuenta las había dejado escapar.
-Vlad, ahora que estamos de frente hablaré bien contigo. Quiero que me digas si tú realmente querías tomar el lugar de tu padre.-
Demonios, estoy casi seguro de que esto no terminará bien.
-pues si, la verdad es que si lo quería.-pude notar que mi respuesta lo molesto aún más.
-bien. ¿Y para cuando piensas retomar tus estudios?-
-no los necesito, ya tengo trabajo asegurado.-
-Vlad, tú no eres la sombra de tu padre entiendelo. ¡No quiero que desperdicies tu vida como él!-
ESTÁS LEYENDO
Mi hermano, mi Omega.
Random¿Qué pasaría si un día te enteras que la persona con la que se supone compartirás el resto de tu vida, es tu hermano?