Episodio 6.

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En las afueras de cierta ciudad la lluvia caía sin parar, más sin embargo aquel alfa y beta estaban refugiados en un hotel de paso.

De a poco la ropa había desaparecido, no solo se escuchaba la lluvia de afuera en aquella habitación, sino también el rechinido de la cama y alguno que otro gemido provenientes de aquel beta.

-ngh. Más.-

El alfa de cabellos grises oscuros dibujo una sonrisa lasciva.-¿más que?-

-más duro. ¡Dame más duro!-aquel beta pedía entre gemidos ser sometido, para su suerte el alfa no parecía querer terminar, así que aumento el ritmo de sus embestidas, dando en el punto sensible del beta. -¡Agh!-

-¿así te gusta?-

-así me encanta. ¡Ngh!-el orgasmo llegó y el semen mancho su pecho.

Karl al ver aquello, se movió más rápido, recordando a cierto pelimarrón solo asi pudo terminar dentro del beta, quién sonrió ampliamente cuando el alfa cayó en su pecho.

-mierda.-susurro mientras el beta aprovechaba la situación y envolvía al alfa entre sus brazos, Karl aún tenía aquel éxtasis en su cuerpo.-te amo. Te amo mucho Liam.-

La sonrisa del beta se borró por completo, no era la primera vez que lo confundía, aún así desconocía a ese tal Liam, pues el alfa era muy reservado con ese tema.

* * *

Un fuerte aroma a comida inundó la habitación, el alfa despertó ya que su estómago estaba vacío. En la mesita de noche pudo distinguir el platillo que lo había despertado. Pero una silueta se atravesó, una que no distinguía por recién haber despertado.

¿Liam?

El alfa se sentó en la cama, cubrió la mitad de su cuerpo y tallo sus ojos.

-buenos días.-saludo el beta sentándose en la cama junto al alfa.-pedí el desayuno.-

Karl quedó un poco triste, por un segundo pensó que podría ser el Omega que tanta felicidad le había traído en alguna etapa de su vida.-¿qué hora es?-

-las once de la mañana.-

-mierda, tengo algo importante en una hora.-de inmediato se levantó y comenzar a vestirse con prisa.

-¿No vas a desayunar?-

-deberías comer tú, fuiste quien lo ordenó a fín de cuentas.-

El beta miraba como el alfa se vestía, amaba a aquel hombre desde que lo había conocido, había aceptado las condiciones de su "contrato" porque pensaba que algún día podría ser amado.

El nombre que tantas veces había escuchado después de terminar el sexo llegó a su cabeza, con un poco de inseguridad se atrevió a hablar.

-¿quién es Liam?-el alfa, quién anudaba su corbata, le miró un tanto molesto, el beta bajo la mirada y miró sus manos con los nervios a flote.-lo mencionaste mientras dormías, y no es la primera vez.-

-ese es un tema que claramente no te interesa.-

-ya. Karl, cuando comenzamos esto...-

-cuando comenzamos esto te dije que solo serían acostones, y que no quería algo serio. Te recuerdo que tú aceptaste.-

-lo sé, pero... Tengo celos.-

-¿celos?-preguntó divertido el alfa.

-asi es. Llevamos un tiempo en esto, es normal que yo llegue a sentir algo por tí.-

Mi hermano, mi Omega.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora