Episodio 21.

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... Caín ...

A decir verdad me había despertado emocionado, ibamos a celebrar nuestro primer cumpleaños juntos después de tanto tiempo, ya habíamos quedado hace meses en celebrarlo juntos todo él día, de hecho había cancelado planes con papá Liam para poder estar con Vlad a gusto.

Pero las horas pasaban y él no llegaba, llamaba a su celular y no respondía, entiendo que tenga trabajo, pero puede llamar para avisar que no vendrá y así dejo de esperarlo como un tonto.

Me resigne a qué tal vez no vendría, así que me cambié por ropa más cómoda y me quedé en el sillón mirando películas, no voy a negar que llore, no entiendo porque, esto antes jamás me habría importado.

Vlad entro al departamento sin hacer ruido, todo estaba a oscuras y en silencio, se dirigió a la habitación y vio que el omega dormía cómodamente.

Se acercó y encendio la lámpara que estaba a un lado de la cama, noto entonces que el omega había estado llorando, sus ojos estaban hinchados, su pequeña nariz estaba roja, y había pequeños caminitos de agua que sus lágrimas habían dejado.

Se sintió inútil y estúpido, había abandonado a su pequeño justo en un día tan especial e importante.

-¿Vlad?-

-hola.-susurro mientras se acercaba para besarlo, Caín correspondió mientras enredaba sus dedos en los negros cabellos de su hermano.-perdoname amor.-

-no importa, ya estas conmigo.-se dieron un pequeño beso y sonrieron.

-traje pastel, ¿comemos?-

Vlad llevo el pastel a la habitación, junto con el ramo de flores que le había comprado, Caín sonrió encantado.

Fue el omega quién comió mayor parte del pastel, Vlad miraba encantado y asustado al Omega, lo amaba tanto que le asustaba lo que podía pasar con ellos en un futuro.

Se acostó junto al omega y comenzó a acariciarle el vientre, era un sentimiento agridulce al saber que tal vez ahí podía estar un bebé que se estaba formando por el amor que ambos se tenían.

-¿Por qué estás llorando?-pregunto el castaño con preocupación.

-estoy feliz.-susurro y beso los labios del omega.-mañana quiero que me acompañes a un lugar, es un secreto.-

-de acuerdo, chico misterioso.-

***

-¿Qué hacemos aquí?-pregunto curioso el omega, pues de todos los lados que se había imaginado, jamás pensó terminar en una clínica afiliada a la empresa.

-te harás un estudio de sangre.-

-¿De sangre? ¿Para qué?-

Vlad paso saliva, algo le decía que no había estado bien ocultarse y decírselo de esa manera.-es posible que estés embarazado.-

-¿Qué?-

-tu aroma ha cambiado, y tu vientre está inflamado.-el omega se levantó y miro desafiante al alfa.

-¿Y eso que? Tu te estás dejando crecer el pelo y no por eso te llevo al manicomio. ¿No crees que era mejor preguntarme antes que hacer todo esto sin avisarme?-

Mi hermano, mi Omega.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora