𝐏𝐈𝐄𝐋 𝐅𝐑𝐈́𝐀 - ᴘᴀʀᴛᴇ ɪɪ

capítulo veinte

Los años pasan.

Alice junto a Jasper se acercaron a Aro, ésta estiró su mano para mostrarle una visión, él al principio se emocionó, pero instantes después su rostro mostró el horror, nos miró y después a Alice.

—Ese es tú futuro, a menos que quieras cambiar el curso —le dijo Alice.

—No podemos hacer eso, la niña sigue siendo una gran amenaza —dijo su compañero.

—¿Y si aseguran que se mantendrá oculta de los humanos? —dijo Edward— ¿podemos irnos en paz?

—Por supuesto, pero ¿cómo piensan hacerlo? —dijo el compañero de Aro.

—Ya te lo dirán —dijo Edward. Unos cascabeles de madera resonaban a medida que dos personas avanzaban por nuestro lado hasta llegar frente a Aro, vi sus vestimentas y las uní a alguna tribu o cultura nativa.

—Estuve buscando mis propios testigos, en las tribus Ticuna de Brasil —dijo Alice.

—Yo soy mitad humano, mitad vampiro, como la niña. Un vampiro sedujo a mi madre, quien murió al darme a luz, mi tía fue quien me crio —dijo el testigo de Alice—, Yo al hice inmortal.

—¿Qué edad tienes? —le preguntó Bella.

—Ciento cincuenta años.

—¿A qué edad llegaste a tu madurez? —le preguntó Aro.

—Yo me hice adulto siete años después de nacer —dijo— desde entonces soy así.

—¿Y tú dieta?

—Sangre, comida humana, puedo vivir de ambas.

Los volturis se debatían entre comenzar la batalla o simplemente irse, pero por lo visto Aro tenía la última palabra, y con la visión de Alice, ya estaba decidido a irse.

—Queridos míos, aquí no hay peligro alguno —dijo Aro—. No habrá pelea, hoy —los que acompañaban a Aro retrocedieron y se marcharon, él giró para vernos por última vez y se marchó.

—Están en retirada, es el momento de atacar —dijo Stefan al avanzar, Carlisle pasó a su lado y le habló.

—No será hoy —les dijo a Stefan y Vladimir, quienes dijeron unos insultos y se marcharon, por parte de Carlisle se acercó a mí y me abrazo y beso, se siente extraño, sobrevivir a tantos enfrentamientos y decir que este es el último, aunque no lo parece.

—Vamos por esas vacaciones —dijo Carlisle, reí leve.

A los días después habíamos despedido a varios aliados, los de Irlanda, los de Rusia, Egipto y más, finalmente solo quedamos la familia que éramos antes. Esperé en la casa de Billy a que llegarán, los niños estaban felices cuando me vieron y al igual que Billy lloraron y me abrazaron, reí leve por tanto cariño que recibía, estaba agradecida de que no hubiese aquella batalla, perder la oportunidad de verlos a todos es triste y desgarrador.

El hombre mitad mortal mitad inmortal se había presentado como Nahuel y tenía razón, en siete años vimos como los gemelos y Nessie crecieron y alcanzaron la edad adulta, aparentaban tener entre veinte y veintidós años, era algo increíble.

No hubo más enfrentamientos ni acoso de los Volturis, pero sí hubo algo que me atormento, el tiempo. Habían pasado en total, desde la batalla aquella, quince años. Además, hoy no era un día cualquiera, era la boda de Matt con Leah, y también nuestra despedida, los Cullen definitivamente nos mudábamos a otro lugar, pues ya sospechaban demasiado de nuestra edad.

—Te ves bien —dijo August a Matt, quien se veía en el espejo y arreglaba su corbata, sonreí y me acerqué a ayudarle.

—Muy bien, ya está —dije cuando lo miré.