🎻S e i s🎻

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Donghae estaba en su departamento aburrido, ese día no tenía ningún tipo de actividad.

Así que en su ociosidad decidió colgar unas luces en su techo, así aprovechaba que su tonto vecino no estaba pues asumía que estaba en sus ensayos.

Se subió a una silla con su martillo en mano y un pequeño bote con sus clavos y comenzó. Uno, dos, tres clavos cuando el timbre sonó.

—¿Quién será? —Se preguntó extrañado bajando con cuidado y se dirigió a la puerta, abrió la puerta y el rostro malhumorado de Hyukjae fue lo primero que vio.

—Deja de hacer ruido. —Le dijo en un tono molesto.

—¿Qué no estabas ensayando? —Le preguntó con el ceño fruncido.

—Si estuviera ensayando no estaría aquí soportando tus molestos golpes.

—Pues te aguantas que quiero poner esas luces. —Le respondió Donghae cruzándose de brazos por la actitud de su vecino. —Y me falta mucho.

—Para todo eres un idiota. —Gruño Hyukjae molesto empujado a Donghae con el hombro pasando a su departamento sin autorización.

—¡Oye! —Grito Donghae yendo tras él. Hyukjae pronto pudo identificar a dónde quería poner las luces. —Lee Hyukjae, sal de mi departamento.

—Eunhyuk. —Murmuro molesto tomando el martillo y subió a la silla.—Pondré esto así que cállate.

—Yo no te pedí que pusieras nada, bajate. —Donghae le dió un pequeño golpe en la silla.

—Deja de mover la estúpida silla, Donghae. —Hyukjae endureció su voz aún más haciendo molestar más al dueño del departamento.

—Pues lárgate. —Y le dió una patada más fuerte a la silla.

Y cómo si estuviera en camara lenta, Donghae solo pudo ver cómo la silla resbalaba y Hyukjae caía hacia lado, lo primero que hizo fue poner su mano para amortiguar su caída.

Grave error.

Donghae solo escucho un "crack" y un fuerte quejido de parte de Hyukjae. Se cubrió la boca con su mano sorprendido por lo que había pasado.

—¿Estás bien? —Donghae se acercó temeroso.

—Eres un gran estúpido. —Maldijo sumamente enojado, Donghae iba a responder pero Hyukjae agregó. —Mi muñeca está rota. —Murmuro con fastidio y un poco de dolor, como si estuviera disfrazando lo que sentía.

—Te llevo al hospital. —Donghae se acercó y lo ayudo a levantarse por más que Hyukjae se negó pero no podía dejarlo así en ese estado, después de todo tenía un poco la culpa.

Lo llevo al elevador a regañadientes hasta el estacionamiento y lo subió en el lado del copiloto.

—Esto es una mierda. —Se fue quejando todo el camino sin siquiera mirar su mano.

Sentía un fuerte dolor y hasta cierto punto quería lloriquear pero no podía hacerlo así que solo fue murmurando maldiciones hasta el hospital donde lo ingresaron de urgencia y le sacaron una placa.

—Tiene la muñeca fracturada. —El doctor le dijo a él y a Donghae.

—¿Enserio? —Dijo Hyukjae con sarcasmo.

—Le pondremos yeso de inmediato, lo tendrás durante tres meses. —Indicó el doctor escribiendo algo en una hoja.

—Espere. —Donghae habló. —¿No podrá tocar el violín durante tres meses?

—Claro que si, Donghae. —Hyukjae respondió. —Con el puto brazo enyesado tocaré igualito a Paganini. —Su sarcasmo salió a relucir.

—Ya entendí, no tienes que ser grosero. —Donghae murmuro apenado porque el doctor solo los miraba.

El violinista »EUNHAE« |TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora