Espías Por Accidente

>Capitulo 14<

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Todos sus compañeros le miraron impresionados.

—Ángela esta... — dijo Irache sorprendida

—¡No vallas David!— dijo Rosalía cuando vio que su compañero tenía intenciones de salir— Controlate o te matarán también. Ahora eres el líder, piensa por nosotras también

El hombre al que Ángela le lanzó la aguja, consiguió sacarla, pero cayó al suelo. Su compañero se acercó a él. Su pierna sangraba mucho.

—Está perdiendo mucha sangre— dijo el compañero que se acercó. El líder le disparo con su arma a la cabeza y lo mató. Todos se veían aterrorizados.

—Dinos donde está tu hija— dijo el líder

—No lo se. Tendría que estar aquí— dijo Lavosier

—Registrad la casa— le dijo a sus compañeros. Cuatro fueron a registrarla, y tres se quedaron en la sala.

***

Ángela se movía lentamente por el pasillo con la niña en sus brazos. Tapaba su boca. Abrió una habitación y se encerró. Se desplomó en el suelo. Se quitó el vestido, la bala estaba incrustada en en los falsos pechos. Esto y la pistola que tenía en medio me han salvado. Fuí muy lenta, calculé mal el peso de la niña.

—¿Estas bien niña?— dijo Ángela

—Si, y ¿tu estás bien?— dijo ella

—Perfectamente, solo ha sido el susto, y el impacto, pero la bala no me ha tocado. Esta aquí— dijo Ángela. Sacó la bala. El alcance efectivo del aca es de 50 metros. Estaba sobre 30. Ha sido algo de suerte que sobreviviera— ¿Como te llamas?

—Laura— dijo la niña— ¿Y tu?

—En realidad soy una espía de la CIA, mi apodo es Amarillo— dijo Ángela

—¿Entonces eres de los buenos?— dijo Laura

—Si, soy de los buenos— dijo Ángela. La pistola ha recibido un balazo y se ha abollado. Ya no me sirve. He perdido el pinganillo al rodar, y estoy sin comunicación. Genial, todo depende de mi.

Laura y yo oímos golpes en el armario. Ella se asustó y se puso detrás de mí. Tomé una lámpara que había en la mesa. Me acerque con cuidado al armario. Lo abrí de un golpe. Mis ojos se abrieron como platos al ver quien había allí.

—¿Agente Lapis?— dijo Ángela confusa. Esa era la agente Lapis, aún llevaba el traje de sirvienta, estaba amordazada con las manos atadas. La desate

—¿Quién eres?— dijo Lapis cuando le quité la mordaza

—Oh, soy la Agente Amarillo. Líder del escuadrón Las Stars. Perdón, pero no traje la placa— dijo Ángela

—No pasa nada, te creo. ¿Qué hacen aqui?— dijo Lapis

—La COA nos mandó cuando desapareciste. Hemos estado investigando la mansión hasta hoy, que nos hemos colado en una fiesta— dijo Ángela

—¿Qué han sido esos disparos?— dijo Lapis

—Los malos, buscan a Sabrina. ¿Puedo saber qué le pasó?— dijo Ángela

—Investigaba la nota de amenaza cuando me descubrió el primo de Sabrina, Leónard. Me atacó y me encerró— dijo Lapis. La ayudé a levantarse

—¿Porque será que no me suena bien eso?— dijo Ángela— La herida de su cabeza se ve muy fea. Debería ser atendida por un médico