15| Devuelta a Topkapi

295 40 11
                                    


La mujer bajo del carruaje y miro el palacio que tenia en frente, de verdad no había cambiado en nada, lo único diferente es que ahora habían pasado diez años más

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La mujer bajo del carruaje y miro el palacio que tenia en frente, de verdad no había cambiado en nada, lo único diferente es que ahora habían pasado diez años más.

Al final se pudo demostrar su inocencia, por lo que se le permitió volver, su mirada fue a parar a sus hijas, Mehpare, Ummugulsum e Ismihan, las tres reían entre si y  hacían bromas, todo lo que había pasado en estos diez años de exilio, las habían vuelto muy cercanas a esas cuatros.

──Sultana.──Gul Agha llamo a su sultana.

Gul Agha era el hombre de confianza de Harika, pues lo había conocido en Edirne y desde allí se habían vuelto inseparables, era su amigo.

Harika lo miro.

──Entremos, ya estan sus cosas dentro.

Harika asintió levemente y se camino, sus hijas iban detrás de ellas, caminaban por los pasillos de Topkapi, levantando susurros y miradas de todas las mujeres allí presentes, los comentarios se hicieron presentes: "¿Esas no son las exiliadas?"

──Sultana.──Harika miro a una joven de cabello marrón claro.

──Tu debes ser Kralice, ¿no?──Pregunto Harika con una sonrisa al ver a la joven

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

──Tu debes ser Kralice, ¿no?──Pregunto Harika con una sonrisa al ver a la joven.

──Así es, Sultana.

──Eres muy bonita, te has de parecer a tu madre.

──Le agradezco el cumplido.

Harika asintió y le dio una mirada rápida, realmente habían crecido todos los niños en este palacio, esperaba que su hija aun la reconociese.

Camino unos pasos más, se dio una media vuelta solo para saber si aun sus hijas estaban con ella, Ummugulsum e Ismihan seguían detrás de ella, la que se había quedado atrás era Mehpare, conversando con Kralice.

La sultana no dijo más y siguió caminando, dejando a su hija con su hermana, sabía que desde que ellas se habían marchado a Edirne, Kralice había mantenido una estrecha amistad con su hermana mayor.

Reinas OtomanasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora