28| Matrimonios= Poder.

140 25 8
                                    

──¿Qué mierda?──Pregunto Nahid al escuchar las palabras de Yavuz

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

──¿Qué mierda?──Pregunto Nahid al escuchar las palabras de Yavuz.

¿¡Quien se creía este individuo para casar a su hermanita y alejarla del palacio?! No, no no, ella jamás iba a permitir que algo así ocurriese.

Y sabía muy que la Sultana Aasiyah tampoco lo iba a permitir, la mirada de la Haseki lo decía todo.

──Pero si serás... ──Dijo la Haseki con toda la rabia del mundo.

──Es una orden mía, y se cumple, prepárenla, Farid Pasa no es un hombre que espere mucho.

──¿¡Y por que con ese malnacido?!──Grito Nahid.

──Regresa a tu palacio, has permanecido mucho tiempo en este palacio.

──Cuando quiera irme me iré, le recuerdo que usted no puede botarme cuando le de la gana.──Desafío Nahid.

──¡Esta boda no se realizara!──Grito Aasiyah sorprendiendo a todos.──Mi hija no se casara, ella solo se casara con alguien que ella realmente ame, con él no.

──La decision esta tomada.

Gunay entro en la habitación del Sultán, junto a Nurgul, ambas se veían cansadas pero aun así se quedaron en pie.

──Yavuz, hazme el inmenso de favor, de casar a Hatice.──Pidió Gunay, cansada de que la hija de Azra no dejase a su ex yerno en paz, si bien ya no tenían relacion alguna, Gunay lo miraba como a un hijo más y Burak la miraba como su protectora.

──Denegado.──Dijo Azra.──Mi hija no se casara.

──Sin embargo, Mehpare si.──Dijo Nurgul.──¿Qué tal si casamos todas a cada una de nuestras hijas?

Aasiyah y Gunay miraron a Nurgul como si se hubiera vuelto loca, ¿Cómo iban a permitir semejante tontearía?, y como si se comunicaran telepáticamente, las tres se dieron cuenta de que eso podría traer beneficios.

──Como saben, nuestras hijas ya estan en edad de contraer matrimonio.──Explico Nurgul.──Creo que seria una buena idea que todas se casaran, cada madre escogerá al esposo de su hija.

Nahid enarco una ceja confundida, Mehpare se escondió detrás de su hermana, como si eso fuese a evitar algo.

Por la tarde se llevo a cabo la elección de todos los candidatos, Esmeray, que habia intentado por años no casarse, casando a Nahid en su lugar, ahora se casaba.

Sahanaz, quien era la más astuta entre las dos, converso previamente con su esposo, un pasa de alto rango, la condición de ser su esposo era que solo le seria leal a ella.

El hombre acepto, puesto que se dio cuenta de la inteligencia de la Sultana, con ella podría tener un mejor puesto.

Las demás Sultanas aceptaron sin más a sus esposos, algunos gobernadores de otras provincias y otros miembros del consejo, Harika fue más inteligente al casar a Ummugulsum con el rey de Polonia, aumentando su poder, a Ismihan la caso con un miembro de alto rango del reino de árabe y como sea permitió que Mehpare se casase con Farid, puesto a que era su hija más cercana, quería tenerla en el mismo lugar que ella.

Gunay caso a Hiranur con el rey español, cambiando su nombre a Amalia, otorgándole un gran poder a ella, y a su hija adoptiva, es decir a Nur, la caso con el gobernador de Anatolia, quedándose solo con Nahid en el palacio Otomano.

Nahid había intentado mover cielo y tierra para impedir el matrimonio de Mehpare, sabia que con ese hombre, pese al gran poder que tendrían, estaban condenando a su hermana a una vida de desgracias.

Logro con ayuda de su "padre" hacer una mini revuelta después del matrimonio de Mehpare, logrando que ella viviese en el palacio otomano y solos los fines de semanas iría a visitar a su esposo, algo que Harika agradeció profundamente a Nahid.

Sahanaz se mudo al palacio del difunto Ibrahim Paşa y desde allí manejaba el consejo a través de su esposo.

Tuvo días antes una conversación con Nahid para preguntarle como mantener a su esposo bajo control, pues su hermana había tenido como siete matrimonios, y en todos esos habia acumulado un gran poder y una gran riqueza, y gracias a esa conversación, se dio cuenta de que su labor de esposa era su mejor arma.

Hatice se mudo a otro palacio, allí pasaba sus días llorando, pues su esposo no era alguien sumamente afectivo y siempre la ignoraba, y su obsesión por Burak tampoco le permitía ser feliz.

A Atike le importaba tres hectáreas lo que pasara con su esposo, solo metía la mano cuando de poder se trataba.

Y todas las hijas de Azahar se fueron a sus respectivos palacios, cada una, casada con gobernadores o con Paşas. 





Reinas OtomanasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora