Cambios de humor

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Nowaki

Desde ayer por la noche Hiro-san a estado muy raro, dice cosas como que ya no lo quiero, que solo me importa mi trabajo, que  lo deje y me valla ya que es el capaz de cuidar a nuestra hija solo, pero cuando me enojo y trato de evitarlo llega a mi lado pidiéndome perdón, llorando que es un tonto embarazado que lo único que hace es quedarse en casa y que no sirve para nada más, entiendo que este embarazado pero de todas las cosas que a dicho, yo personalmente nunca las aria y menos las pensarías ES EL AMOR DE MI VIDA POR DIOS, no lo entiendo sus cambios de humor son raros, y eso que ya cumplió los 6 meses, lo único hermoso de todo esto es su barriga es tan linda mi hija crese cada vez más, la amo mi beba.

-Nowaki que haces te quedaste pegado viendo la tele – Hiro-san se sentó a mi lado con un plato de espaguetis.

-Ah! Ah sí, lo siento estaba pensando un poco- me raque el cuello y me quedo mirando fijamente mientras masticaba su comida.

-Estas mintiendo dime ahora que está pasando o me enojare muchísimo (7.7)

-Amor ya te dije que no es nada- le estire los brazos- ven acomódate a mi lado- No dijo nada solo se levantó y se dirigió a la cocina-suspiro- ahora sí que se enojó-susurre-.

Cuando llego la hora de dormir me di cuenta que él se fue primero a la cama, como no me daría cuenta si cerró la puerta de la habitación de golpe asiendo que el sonido que emitió sonara por toda la casa, cuando apague el televisor y me dirigía a nuestra habitación, no pude abrir la puerta, sí que se había enojado tanto como para dejarme solo durmiendo en el sofá, que podía hacer todo por sus cambios de humor. Resignado me fui al sofá y al acostarme me di cuenta que no tenía nada para cubrirme a sí que fui a la habitación de Miku y saque dos fresadas de color rosa, al día siguiente me desperté con alguien que acariciaba mi cabello.

-mmm...- bostece-Hiro-san ¿eres tú?, que sucede.

-Nada- estaba completamente sonrojado- quería pedirte perdón, pero anoche realmente me enoje, siento que no confías en mí y estoy seguro que algo extraño estabas pensando, pero ya no me cuentas nada.

-Amor- lo abrase y lo subí enzima de mí en el sofá- porque dices eso si yo siempre estoy contigo en todo, anoche estaba pensando sobre Miku y tú, por eso no le di mucha importancia.

-Está bien te creo- apoyo su cabeza en mi cuello- te amo.

-Hiro-san creo que deberías bajar de enzima mío, tu barriga nos apretar- comencé a reír sin darme cuenta de que otra vez se había enojado, se levantó del sofá y me dio un  golpe en la cabeza-Pero que paso ahora, porque me golpeas.

-Sabes espero que te guste dormir en el sofá por los siguientes 4 meses ya que, por culpa de MI BARRIGA en la cama no cabes- y se fue en el baño seguido de un puerta que se hacía notar por su sonido, que podía hacer en momentos así solo se puede reír o en este caso pensar en cómo solucionar todo esto.

Era ya de tarde alrededor de las 5:00 pm y Hiro-san ni siquiera había bajado a comer, tuve que dejar una bandeja con su almuerzo ara que comiera, lo bueno fue que la recibió, estuve toda la tarde golpeado la puerta de la habitación pero solo escuchaba unas palabras como ¡YA TE DIJE QUE EN LA HABITACIÓN NO CABES VETE! O ¡PORQUE NO VAS CON NARU EL NO TIENE UNA BARRIGA QUE TE MOLESTE!, me siento muy culpable de que se allá enojado, aunque allá sido por una broma, esta tan sensible que fácilmente se puede decir que parece una mujer embarazada, claro el también esta embarazo jijiji... mi amor te amo tanto. El sonar de la puerta me saco de mis pensamientos... era la madre de mi amor.

-Nowaki que alegría verte- me quedo mirando con cara de pen a y confusión-  veo que por tu cara no has tenido un bueno día, dime como esta él.

Todo cambia, aun así te amo (yaoi/m-preg)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora