Todo cambia, aun así te amo (yaoi/m-preg)

Pequeños momentos

Nowaki

-Suspiro- Ok, Naru-kun cuida de el cuándo vengas al hospital llegara la madre de Hiro-san a cuidar a Miku, después iré yo a casa.

-Está bien sempai, Miku es una buena niña, no me molesta cuidarla un par de horas, Hiro-san tomo unos medicamentos que le recete, asique revisare como esta antes de que me valla.

-Hi, tengo que volver al trabajo, me llamas cualquier cosa, bye.

-Sí, lo mantendré informado, bye.

~~~Fin de la llamada~~~

Después de la llamada de Naru-kun, llame a la madre de Hiro-san, me dejo más tranquilo, ya que dijo que iría de inmediato a ver la salud de mi amado y aprovecharía de cocinarle algo, pues eso es lo mejor, no sé si Naru-kun sea un muy buen cocinero, pero con ella en casa no abra problemas.

El horario de trabajo se pasó rápido, asique apenas vi que Naru-kun entraba por la puerta de mi oficina, tome mi bolso y lo deje a cargo, pase por la tienda de convivencia y compre algunas de las cosas que podrían hacerle bien y además un tarro de leche para Miku que casi ni le quedaba, después de eso me fui directo a casa, al llegar me recibió mi suegra, la cual tenía a mi pequeña en brazos y la cena lista.

-Nowaki, que alegra verte, Hiro-san está en la habitación, está despierto si quieres puedes ir a verlo, aunque te recomiendo que uses una mascarilla, ya que su resfriado tiene para un buen tiempo.

-Hi y muchas gracias por cuidar de él.

-Pero que dices soy su madre, no lo puedo dejar así- Dijo con una sonrisa de oreja a oreja.

Me di la media vuelta y me dirigí a la habitación, pero antes me coloque la mascarilla y entre en esta, las ventanas y la cortina estaban cerradas, las luces estaban apagadas y lo único que note fue un bulto en la cama, el cual me estaba mirando.

-Nowaki, que bueno que llegaste, aun no me siento del todo bien ¿mi madre ya se marchó?

-No, cenaremos y se ira- me acerque a él y me senté a un lado de la cama, lo mire y lo tome la mano.

-Creo que vas a tener que dormir o en el sofá o en el suelo ¿Cuál eliges?- comenzó a reírse.

-Jejejeje- nada de eso mi lugar en la cama es a tu lado, recuerda que yo no me enfermo así como así, además por mi trabajo tengo que ser resistente con las enfermedades.

-Está bien.

-Bueno iré a cenar después de todo cuando tu madre se valla tendré que cuidar de dos bebés.

-¡¡¿Qué?!! Yo no soy ningún bebe, el único bebe de esta casa es Miku, así que no te confundas.

-Hiro-san como siempre reprochando por todo, será mejor que me vallas, parece que lo enojón no se te quina ni aunque estés enfermo, por cierto tomare tu temperatura- le pase el termómetro y se lo coloco en su boca- bueno volveré dentro de un rato.