El día siguiente al de la fiesta fue extraño.
El cielo era gris. Había estado gris desde que el otoño comenzó, sin embargo, estaba aun más gris.
Era difícil de explicar incluso para el joven Broflovski, pero, podía decir que era como si el día estuviera triste.
Era un día que Kyle normalmente disfrutaría pasándolo en pijamas, viendo alguna serie tonta y comiendo donas con chocolate caliente.
Miró a sus amigos despertarse perezosamente, cada uno mostraba su resaca a su propia manera y era hasta divertido verlos.
Butters sostenía su cabeza, como si creyera que soltándola se le iba a despegar del cuello, mientras tenía los ojos abiertos como platos, probablemente sin creer que una resaca fuera tan dolorosa
Kenny simplemente miró al infinito con los ojos entrecerrados, sin mover algún otro músculo probablemente estando demasiado adolorido para hacerlo.
Wendy bufaba hasta con el sonido más pequeño, dejando en claro que quien elevara un poco más el volumen, de se ganaría como mínimo un golpe en la cara.
Clyde simplemente puso una almohada en su rostro cuando la tenue luz del día iluminó la habitación.
Y Stan…
Bueno, él estaba de maravilla.
Kyle lo miró revisar cada parte de la alacena de su amigo, prácticamente vació todos los anaqueles antes de atacar el refrigerador.
Finalmente lo escuchó tararear mientras preparaba la mezcla de huevos, leche, canela y mantequilla para preparar las tostadas francesas que después cocinó como desayuno para todos los presentes.
-¿Cómo..? ¿Por qué no estás hecho una mierda?-
Preguntó el pelirrojo mientras lo veía espolvorear azúcar con canela a una tanda de panecillos ya fritos.
El joven Marsh soltó una risa burlona, mirándolo con superioridad.
-Oh pequeño Kyle, anoche apenas estaba divirtiéndome cuando se acabó el alcohol-
Era impresionante de cierta manera la resistencia que el moreno había desarrollado gracias a sus malos hábitos de bebida.
-Ugh, te odio-
Recostó su cabeza en la mesa, mirando a su amigo terminar de freír otra tanda de los fragantes panecillos antes de espolvorearlos con mas azúcar con canela.
La verdad era que olían muy bien y su estómago rogaba por algo de comida.
-Pensé que solo comías lo que Kenny te servía-
Le dijo en tono juguetón al moreno.
-Me gustaría hacerlo, pero no va a cocinar nada así-
Señaló al rubio con su espátula y Kyle lo vio balancearse un poco, como si le costara mantener el equilibrio a pesar de estar sentado.
Una ligera risa se escapó de sus labios y pensó que naturalmente, todos los miembros de Unfortunate se cuidaban unos a otros en sus peores momentos.
Iba a decirle algo más cuando vieron a Butters levantarse.
-Mi uber llegó-
Informó con la voz ronca y aún sujetando su cabeza.
-Pero no has desayunado-
Stan trató de persuadirlo, pero Butters lo cortó.
-No, no, si como algo voy a vomitar-
Lo miraron, estaba tan demacrado y destrozado como se puede estar después de beber hasta la inconsciencia.
-… Vale, solo avísanos que llegaste a salvo-
Asintió y salió, mirando fijamente su teléfono cuando pasó al lado de Kenny, sin prestarle atención.
Y aunque eso extrañó al joven Broflovski, quiso pensar que era una señal de que Butters estaba tratando de seguir adelante con su vida.
Antes de poder decir cualquier cosa, Kenny también se puso de pie.
-También me voy-
Stan parecía sorprendido y a él también trató de pedirle que se quedara.
-Vamos Kenny, cociné para ti, es algo que pasa una vez al año, deberías disfrutarlo-
El rubio tenía la mirada perdida y solo negó con la cabeza.
-Tengo que pagarle a la niñera y… Quiero pasar tiempo con Karen-
-Al menos come una con nosotros, te ayudará a recomponerse, no puedes dejar que te vea así-
-Caminaré-
Miró a su amigo, mostrando apenas un rastro de conciencia en aquellos ojos cansados.
-Una resaca no me va a matar, estoy bien-
Y se fue.
Kyle pensaba que no había conocido a alguien tan orgulloso con Kenny en la vida. Era uno de sus defectos, no podía aceptar que había hecho algo mal o que su idea estaba equivocada aunque las consecuencias de esta le estallaran en la cara.
El joven Marsh suspiró cansado y vio dos de los platos que ya había servido.
-Me los puedo comer-
Ofreció el pelirrojo casi sin pensarlo, tratando de darle algo de consuelo al más alto, lo que pareció funcionar, pues este le sonrió con burla.
-Si, olvidaba que eres como un agujero negro de comida chatarra-
Kyle rió, sintiendo sus mejillas un poco rojas.
-Pero si fueran vegetales ni siquiera los probarías-
-¡Saben asqueroso, no es una comparación justa! –
Escuchó la risa de Clyde a sus espaldas, cansada y entrecortada como si le doliera el cuerpo al hacerlo. La risa de cualquier joven con una monstruosa resaca. Se giró para verlo quitarse la almohada del rostro y sentarse lentamente, como si se tratara de un anciano adolorido.
-Eres tan parecido a Butters en muchos aspectos-
-Es obvio por qué le gustas-
La chica los aún parecía no soportar el ruido, pero contribuyó a la conversación algo divertida de ver la expresión de desconcierto del joven Broflovski.
-¿Kenny les dijo? –
Lo último que quería era que Butters se enterara de aquella cita-no-cita que habían tenido semanas atrás y de esa extraña relación que se estaba formando entre el y Kenny, tenía miedo de su reacción, que llorara, y que lo llamara mal amigo. Tenía miedo de perderlo.
-No hace falta, lo hace tan obvio que duele mirarlo-
Wendy se acercó a la mesa y robó una de las tostadas francesas del plato de Kyle.
-Entonces… ¿Butters sabe?
Casi entró en pánico, creyendo que su mistad con el pequeño rubio terminaría pronto, hasta que el joven Donovan se sentó a su lado.
-No, Butters está muy dolido todavía-
-El dolor lo cegó y ahora que bebe… Bueno, no está muy atento-
Concluyó la chica con una mirada triste.
Stan finalmente terminó el último plato y se sentó en la mesa con sus amigos.
-No es estúpido, se dará cuenta en algún momento-
El pelirrojo sintió que se quedaba sin aliento ante los comentarios de sus amigos.
-¿No se lo dirán?
Hubo un silencio incómodo, Wendy y Clyde se miraron entre si, haciendo evidente que ya habían tenido esa conversación.
-No sabemos si es lo… Ideal-
La voz de Clyde era tentativa, no estaba seguro de que decir y Kyle no sabía si era su postura original o si lo ocurrido la noche anterior tenía algo que ver.
-No quiero decirle, no ahora, está sensible-
Wendy parecía afectada por la situación, más de lo que el pelirrojo creía que estaría.
-… Eventualmente le diremos-
El castaño lo miró, con firmeza a pesar de su anterior actitud.
-Si de verdad saldrás con Kenny, es mejor que tú le digas a Butters-
Fue entonces que el joven Broflovski entendió como los tres habían malentendido la situación y creían que a él le interesaba salir con Kenny.
-No, no, no, yo no voy a salir con él-
Lo miraron, era obvio que no creían en sus palabras.
-¡Es verdad, lo juro!-
Sus amigos no dijeron otra palabra, se centraron en comer el desayuno que Stan les había preparado y la conversación murió.
Tenía que aclarar todo con Kenny lo antes posible.°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°•°
Holiiiiiiiii
Aquí les traigo otra actualización que espero disfruten uwu
Me entró la duda, qué edades tienen los que me leen?
Porque se alcoholizan casi siempre y ya me dió pendiente que me lea alguien muy joven ._.
Y los que ya beben han tenido crudas así de horribles? O son como Stan que ya no tienen hígado? Jsjejdud
Qué piensan de la relación de Kenny y Butters muriendo cada vez más?
Piensan que Kyle debió aclarar desde el principio que no saldría con Kenny?
Se enterará Butters de esa extraña relación?
Déjenme saber qué piensan uwu
Gracias por esperar, leer, votar y comentar mis actualizaciones, les amo -muac muac- ♥️♥️♥️
ESTÁS LEYENDO
• Unfortunate • [Style]
FanfictionUn accidente lo inició todo. Debías ser muy desafortunado para conocer a alguien como él, a un mujeriego idiota y alcohólico. Pero más desafortunado debías ser para enamorarte de él. Su vida cambió con aquella sonrisa, fue mala suerte, fue una jodi...