Sábado al medio día ¡Perfecto para hacer lo que sea!Nuestro equipo Z decidió pasar el día en el laboratorio del Profesor Utonio para así relajarse, irónico que ellos se relajen en el lugar para el que trabajaban.
Talvez les gustaban que el lugar tenga mucho espacio, tecnología, aire acondicionado, revistas, una televisión gigante, un Ken para molestar y el echó se estar lejos de sus familias por un rato.
Si todos querían el laboratorio podía ser un lugar silencioso llenó de pa—...
– ¡¡KYAAAAAAAAAA!!.
Un grito llenó de alegría que además de interrumpir a la narradora causo que la paz lograda en el lugar quedará en el olvidó.
– Esa mocosa...– murmuró Bellota fastidiada mientras veía su celular aunque no se podía concentrar.
– ¡Otra vez, otra vez!– insistió la voz de una niña pequeña.
Se trataba de una niña de unos 6 años aproximadamente de cabello castaño claro amarrado a una coleta, ojos lilas grandes y hermosos, vestía un vestido violeta con una franga negra en medio junto a unas medias blancas con zapatos negros.
– Una última vez y no grites ¿Entendido Bunny?– sonrió Butch quien sostenía a la pequeña en brazos.
Bunny era el nombre de esa pequeña y adorable niña que hace 4 meses se volvió una nueva integrante del laboratorio.
”¿Por qué? ” seguramente que estes preguntando.
Resulta que hace 4 meses investigando los sucesos que han pasado desde la primera liberación de rayos Z blancos el Profesor Utonio notó que hubo un pequeño rayo Z blanco que no logró detectar y cayó sobre un orfanato en los suburbios de New Townsville.
La pequeña Bunny resulto ser la afectada por aquel rayo pequeño pero no hizo gran cosa y los dueño del orfanato no notaron nada extraño en su actuar por lo que Utonio decidió llevarse a Bunny para vigilarla e investigarla.
La llegada de Bunny llenó el laboratorio se risas y alegrías, siempre se la escuchaba charlar sola o soltar alguna risilla encatadora lo cual llegó a ser reconfortante para los Utonio tener otra personita en casa.
Fue buen recibida por el equipo Z que le dió la bienvenida con cariño tomándole cariño a la pequeña y ganandose el cariño de la pequeña.
– ¡Jajaja!– río dulcemente Bunny cuando Butch volvió a girar con ella en brazos.
– Bunny, Bunny– llamó Burbuja con una dulce sonrisa– ¿Quieres que te peiné?– sugirió sosteniendo un peiné.
– ¡Si!.
Bunny bajo de los brazos de Butch para correr hacía Burbuja quien la sentó en el sofá y la comenzó a peinar.
– ¡Brick! ¿Quieres un dulce?– la linda niña le ofreció un chocolate pequeño a el pelirojo a su costado.
– Pase pa' ca'– Brick rápidamente le quito el dulce y siguió viendo televisión.
La pequeña Bunny continuó comiendo dulces mientras su cabello era cariñosamente peinado por Burbuja.
Butch se sentó junto a Bunny mientras retomaba su lectura.
– ¿Que lees Butch~?– preguntó curiosa Bunny viendo el libro.
– Son leyendas populares– respondió amablemente el ojiverde oscuro.
– Oooh ¿Como el ginete sin cabeza?– volvió a preguntar mientras comía otro chocolate.
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La Declaración
Romance¿Alguna vez tuviste problemas para declararte? Pues los RRBZ sí. ¿Pero como no tener problemas? Los nervios, los rivales, los inconvenientes, su vida diaria interponiendos. Y peor ¡Temor al rechazo! Declararse es dificil y mas si no sabes si serás o...