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Sueños a futuro.

(💙👗)

Hoy Kiyoko no estaba, según Burbuja la señora salió temprano a jugar con una amiga cercana y luego ambas irían a un jardín japones reconstruido.

Boomer fué de visita como siempre hacia los sábados, se alivió un poco de que Kiyoko no estaba debido a que la ancianita aun estaba algo molesta desde que a él se le ocurrió soltar una palabrota.

Ahora ambos se encontraban en la habitación de Burbuja, algo que rara vez se le permitía pero fue porque la rubia noto que su chaleco tenia un agujero y decidió repararlo. Entonces allí estaba, echado en la cama de Burbuja mientras jugaba con su gato Koichi y ella cosía cuidadosamente ese desgarre en el chaleco.

Le gustaba el cuarto de Burbuja. Era grande y muy ordenado, tenía lindos tonos pasteles pero sin ser exagerados y olía bien, sin mencionar que tenía galletas.

Boomer soltó el juguete con el que distraía al felino y permitió que se divierta solo mordisqueando la pluma, miró con curiosidad la habitación y se dedico a mirar las fotos.

Varias de las fotos en su escritorio eran de ella junto a Bombon y Bellota, otra de su abuela, una de Koichi y otra de su abuelo. Eran personas importantes para Burbuja, lógicamente estarían allí.

Su sonrisa se ensanchó cuando notó una nueva foto allí: Una suya y de sus hermanos haciendo mueca a la camara, en esa foto aun usaban sus viejos uniformes y era de cuando recién entraron al lado bueno.

— ¿Mmh? ¿Que es eso?— cuestionó Boomer viendo el libro lleno de hojas y muchas cosas en el escritorio de Burbuja.

Burbuja levantó la mirada viendo el libro y luego volvió su completa atención al chaleco.

— Mi libro de diseños— respondió con neutralidad.

El rubio la miró unos segundos, se veía distraida y perdida, desde que Akira aparentemente revelo esa misera información la vida de Burbuja pareció un pequeño giro. No sabía porque... Pero sentía que había otra cosa que no le estaba diciendo, y ese era el motivo por el cual cada día se veía mas distraída y en las nubes.

— Burbuja...

— Puedes verlo si quieres— habló rápidamente la linda chica dándole una apenada sonrisa.

Él la conocía perfectamente, con eso quiso decir que no iba a decir nada.

Lo acepto. Era decisión de ella decirle que la preocupaba.

Tomo el libro con cuidado comenzando a mirarlo con curiosidad, se sorprendió por los hermosos dibujos de ropa y diseños de accesorios, eran maravillosos. Había una pagina dedicada a un diseño con cualquier temática y cada uno era maravilloso.

— “Tematica; Morado, verano, vestido, fresco”— leyó en voz alta con una sonrisa viendo el hermoso vestido veraniego y vio que el diseño era para una persona de talla grande— ¡Es muy hermoso Burbuja! Tu habilidad con el lapiz, la manera en que usas los colores y suavemente los mezclas con otros que combinen es maravillosa— elogió pasando pagina para ver el diseño de un vestido de princesa.

— ¿Tu crees...?— Burbuja se sonrojo de la pena aun atenta a lo que hacía con la aguja— Aun no puedo hacer perfectamente el trazó para el final del vestido.

— ¿Bromeas, no? Todo lo que haces es perfecto, logras hacer de forma perfecta todo lo que dibujas— viendo el dibujo de un vestido elegante y notando que era el mismo que parecía estar en pleno proceso en uno de los maniquíes de Burbuja— ¡Es grandioso! Desearía poder hacer ropa tan bonita y que se viera tan fácil como lo haces tu— hizo un puchero.

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