Sin Máscaras

24. ¿Segura?

_ ¡Tramposo!. - le dije riéndome en los juego del tiro al blanco - ¡Me empujaste!.

_ No es mi culpa que seas tan mal en este juego. - me dijo Stephen y mire como lanzó una pelota de béisbol justo en el blanco - Toma, para que no digas que soy un tramposo.

Me pasó un gran peluche de un pato que le dió el vendedor y yo lo recibí con felicidad que se le contagio a Stephen.

Pensé que Stephen me llevaría a otro ambiente más serio o algo así. Me encanta que me haya traído aquí.

_ Gracias por arrastrarme aquí. - le dije caminando entre la gente con Stephen a mi lado - La verdad lo necesitaba.

_ Esto es un pago... Ni lo menciones. - le sonrió y mi mirada estuvo muy fija a un rubio que estaba acompañado -

Me detuve y hicimos contacto visual y Stephen me miro y levanto la mirada a Steve que estaba con una chica rubia... Muy linda a decir verdad.

_ Steve. - dije y el soldado se acercó a nosotros con su chica - Hola. Que genial que nos encontramos aquí.

_ Genial. - me dijo y miro a stephen con una seriedad - Doctor Strange.

_ Rogers. - lo saludo con la misma sequedad -

_ Soy Sharon Carter. - se presentó y me estrecho mi mano que una felicidad falsa - ¿Están en una cita ustedes?.

_ Stephen me trajo aquí. - dije acomodando mi cabello - Que pasen bonita velada.

Dije para caminar con las luces de los puesto en mi cara y acompañada de la presencia de Stephen.

_ ¿Conoces a Steve?. - le pregunté con duda -

_ Si... Bueno, solo de oído. - nos acercamos al callejón oscuro donde salimos del portal -

Aparecimos en su casa y dejé el gran pato en el suelo para dar unos pasos al sofá y sentarme. Mire a Stephen que se quitó el abrigo y la bufanda.

_ Te quiero enseñar algo. - me levanté del sillón y Stephen me dió su mano -

Lo seguí por la escaleras y caminamos hacia un pasillo con varias puertas... Esto me está dando curiosidad.

Nos detuvimos frente a una puerta que se sentía un poco fría y el me soltó mi mano para tomar el pomo de la puerta y una escarcha blanca se poso en mi haciéndome sonreí y pase para ver una cabaña que estaba muy apartada llena de varias arboledas muy lindas.

_ Pasa, no te haré nada. - Asentí para dejar esa puerta atrás -

La nieve estaba en mis pies y este clima era tan tranquilo y frío.

Subí los escalones y stephen abrió la puerta de esa casa con calma y tenía una gran chimenea encendida.

_ ¿Esto estaba planeado?. - le dije para quitarme el abrigo -

_ No, la chimenea funciona al sentir mi presencia. - se quitó su abrigo -

Esto estaba muy limpio y delicado. Una decoración inglesa con las paredes de madera... ¿Pasará mucho tiempo aquí?.

Se dejó caer en el sofá y apareció una botella de whisky a su lado.

_ ¿Te quedarás ahí de pie?.

Negué con una sonrisa y me senté a su lado. Un silencio un poco tenso se poso en nosotros y la verdad que siempre pensé que estos silencio eran por Christine. No lo culpo, pobrecito.

_ ¿Tan mal te dejo Christine?. - le pregunto y su cara se volvió tensa y dura expresión -

_ Se casó... Ya no es mi problema. - bebió de su trago - ¿Te importa ese tema?.