¨Hospital¨

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Podía sentir la decepción y enojo en sus palabras me veía como menos que basura no le importaba lo que yo podía sentir solo le importaba su estatus, es tan vil que logro montar un espectáculo con tal de seguir con esto, ¿hasta dónde es capaz de llegar? Su boca seguía moviéndose mientras me reprochaba cosas, pero en este momento yo ya no escuchaba lo que decía, igual que cuando era niño no había cambiado nada yo ignoraba sus palabras y él lo que mis ojos gritaban. A él no le dije nada, él era la persona que menos quería ver este día, pero claro estaba que él no iba dejar pasar la oportunidad de acribillarme con sus palabras. Mientras el seguía con su discurso y yo con la mirada en la fija en un lugar llego la única persona que deseaba ver. Mi madre lo abrazo y beso su mejilla, mientras mi padre se volvió hacia él y saliendo del cuarto le dijo tocando su hombro:

—William hijo, gracias nuevamente por salvarlo de sus pendejadas

Salió de la habitación sin decir nada más y detrás de él mi madre mientras en mi mejilla resbalaba una lagrima y no sé porque ya debería estar acostumbrado a esto. Will los siguió con la mirada hasta que desaparecieron, luego camino unos pasos hacia delante, tenían unas ojeras muy pronunciadas, venia con ropa sport no de traje como siempre, sus manos estaban en los bolsillos de su short, yo no quería inicia la conversación de hecho no estoy seguro de que quiero hablar y el lo noto así que inicio

—¿Como te siente? "Fue su primera pregunta mientras detallaba aquel horrible cuarto "

—Con sed

Él se tomó un vaso de agua que estaba en la mesita junto a la cama y me ayudo a tomar. Parecía que entre los dos existía una sensación de desconocimiento, como si ambos tuviéramos miedo de hacer preguntas. Hasta que finalmente dijo:

—¿Y esos golpes cómo van?,

—Estoy bien, me duelen más las fajas, dije

—¿Fajas? Pregunto confuso

—Si, en mis manos, respondí

Él se acercó a mí y retiro la sábana blanca de mi cuerpo

—¿Es enserio? dijo molesto al verme atado

Empezó a abrir las fajas y sentí como la sangre siguió su camino con fluidez

—No puedes desatarlo dijo la mujer de hace un rato, entrando al cuarto

—Si puedo, le dijo Will de forma autoritaria

—Es el protocolo en casos como estos, insistió ella

- —Mientras yo esté aquí no lo van a tener atado como un animal, aunque sea al protocolo

La mujer se retiró sin responder nada

—Gracias, le dije aliviado por el dolor

William pensaba cada una de sus palabras cosa que normalmente no hace, el ese ams arriesgado dice las cosa como las piensa, pero en esta ocasión, probablemente pensaba en su siguiente oración porque no era un buen momento para reproches

—No voy a reclamar nada Jona por lo menos en este momento, Pero eres mi mejor amigo sabes todo de mí, tenemos más de 15 años de amistad y bueno yo creía que yo también sabia todo de ti, pero luego te encuentro así... bueno tu más que yo, sabes cómo te encontré. Y me corrijo somo hermanos Jona

Mientras me decía cada palabra no sostenía su mirada en mí, le costaba verme a los ojos y se notaba está afectado mucho más de lo que yo pudiera imaginar, sin embargo se hacia el fuerte ante mi

—Lo siento, no quise...

—shhh no, no pidas disculpas, por lo menos por ahora

Con su mirada en el piso me dijo:

Estimada Claris OlsenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora