Angel with a shotgun (Destiel) (Sterek) (Traducción)

Lucifer

Stiles se alegró de que Derek no estuviera en el auto con él en el viaje a Missouri. Estaba seguro de que escucharía la manera obvia en que su corazón se aceleraba en su pecho cuando le preguntaron si estaba nervioso. Trató de ocultar sus nervios para mantener baja la tensión.

"Estoy bien." Respondió Stiles con desdén. El viaje había sido dolorosamente silencioso hasta ahora.

"Eres muy parecido a Dean, ¿lo sabías?" Preguntó Cas, girándose para mirar a Stiles en el asiento trasero. Sam iba con Bobby.

"Sam me dice eso todo el tiempo." Stiles sonrió levemente. No le importaba que lo compararan con Dean. Siempre había admirado a su hermano mayor.

Dean pasó la señal de Carthage, lo que hizo que el corazón de Stiles se acelerara. Este era el gran momento. No podía arruinarlo.

"Lo puedes hacer." Dean miró por el espejo retrovisor y captó la atención de Stiles. Era como si hubiera leído la mente de Stiles.

"Sí." Stiles desvió la mirada. No podía imaginar lo molestos que estarían todos si la cagaba.

El grupo de cazadores salió de los autos y miró alrededor del pueblo. Era extrañamente estéril.

"La granja está ahí arriba." Señaló Bobby hacia la carretera vacía.

"Deberíamos separarnos." Sam quitó la bolsa sobre su hombro y se la ofreció a Dean. "Tú y Cas van hacia el este. Stiles y Bobby hacia el oeste. Iré al frente, iré directamente hacia él."

"Sam." Suspiró Dean, sin gustarle como sonaba eso.

"Me cuidas la espalda, y él no me hará nada. Me necesita con vida." Le recordó Sam a Dean.

Dean solo asintió. Sabía que Sam tenía razón. Stiles tenía que ser la prioridad.

"Cas debería ir con Stiles y Bobby."

"Podemos manejar algunos demonios, Dean." Intervino Stiles.

"Pero debes evitar lastimarte. Cualquier lesión puede reducir tus posibilidades de sobrevivir a esto."

"Dean tiene razón, y en la posibilidad de que Lucifer sienta la gracia de Gabriel, podría asumir que es mía si estamos juntos." Intervino Cas.

Stiles asintió a regañadientes. No le gustaba que Dean estuviera solo, pero todos estaban tomando riesgos en esto. "¿Cuándo debo inyectar esto?" Preguntó, sacando la jeringa que había escondida en su chaqueta.

"Probablemente más temprano que tarde. No quiero arriesgarme a que lo atrapen en una pelea con un demonio." Respondió Bobby, escaneando las calles. Era una vista inquietante.

La mandíbula de Dean se apretó y las cejas de Sam se fruncieron con preocupación.

"¿Qué pasa si lo matan antes de que llegue a Lucifer?" El tono de Dean era tenso. A nadie le gustó la idea, pero era una pregunta válida.

"Tendremos que movernos rápido." Cas miró a su alrededor como si esperara problemas. Pero no hubo ninguno. Y no parecía que fuera a venir ninguno.

"Faltan quince minutos para la medianoche." dijo Sam, mirando su reloj.

Stiles ató un torniquete que había sacado de su bolso alrededor de su brazo y alineó la aguja de la jeringa.

Dean dio un paso adelante cuando notó la vacilación de Stiles. "Déjame."

Stiles nunca le diría a Dean, pero estaba agradecido por la ayuda. No le gustaban las agujas. Solo esperaba no desmayarse. Eso sería más que vergonzoso. No podía perder su oportunidad por estar inconsciente.