II

21.5K 1.3K 346
                                    

— Sabes que no es necesario que debas actuar de esta manera, ¿no?

Espetó entre tiernas risillas el omega, dejando ser a su mayor cuando este se ofreció encantado a ayudarle a sentarse, las palmas acaneladas de este jalando en retroceso aquella silla para luego desplazarla de regreso a su lugar en un acto cordial, todo esto para que el omega no realizara el más mínimo esfuerzo.

Taehyung al terminar su labor encaminándose hacia el otro extremo de la mesa para ahora él poder tomar asiento, tal cual como debía de ser ante una cita, y en serio llegó a ser enternecedor como ambos jóvenes se sonrieron cómplices. Siendo acogidos por el frío ambiente que los rodeaba junto con aquellos hermosos y altos árboles de cerezo pertenecientes a aquel singular parque.

Seguramente se preguntarán.

¿Por qué lo describía de tal manera?

Simple, ya que el tan solo hecho de estar ahí presentes los volvían partícipes de un total robo a la ciudadanía, y todo gracias a las decisiones arbitrarias de las autoridades que ante sus deseos de lucrarse no se ingeniaron mejor idea que el de arreglar y amoblar aquel centro, supuestamente con el fin de beneficiar a los alrededores esto, por conocidas razones, habiendo sido una total falacia.

Al final, el antes parque de libre acceso, terminando en una condición que quien deseará el ingreso debía pagar una entrada mayor de por encima de lo cotidiano, impidiéndoles el paso a quienes no disponían de aquellas cifras, pero que regularmente con anterioridad acudían a este, lastimosamente las cosas eran así ¿qué más daba? Nadie podía cambiar lo hecho, tan solo hacía falta acoplarse.

¿No era como si pudiera venir y derrumbar aquellas enormes rejas que rodeaban todo el centro recreativo?

Ahora que lo pensaba detalladamente.

No sonaba tan mala la idea.

— Déjame consentirte — pidió este, su palma extendiéndose hacia los labios del menor para poder limpiarle con delicadeza la esquina de este al haberse visto manchada por el helado de chocolate que le invitó por gusto del menor — Un lindo omega como tú merece el mejor de los tratos, ¿no crees?

— Si lo estás haciendo únicamente para impresionarme, te aseguro que esto no funcionara conmigo — confesó con soberbia Jungkook, su mentón apoyándose en su palma al observar cómo era debido al alto alfa que destilaba corazones de sus oscuros ojos — Es en vano, Taehyung

Oh, diablos.

Que lindo se escuchaba su nombre salir de entre sus labios.

A Taehyung le gustaba...

Joder, le gustaba mucho.

— Oh, claro que soy consciente de ello, bonito. Seguramente una cifra descomunal de alfas lo han intentado y han fracasado — respondió de igual forma, Taehyung copiando tal cual la postura de su menor que entrecerró sus almendrados ojos cafés, mientras arqueaba su poblada ceja — Pero te puedo asegurar que yo soy diferente

— ¿Diferente? — repitió burlón, el omega ganándose un asentimiento seguro del contrario — ¿Y dime por qué lo serías?

Encantador...

El menor es simplemente encantador.

— Porque muy a diferencia del resto, yo soy auténtico, Jungkook. Yo no necesito cambiar en lo absoluto para impresionar, jamás lo he hecho — el nombrado viéndose flaquear con levedad ante los nervios cuando el de hebras doradas le recorrió todo el semblante con su penetrante mirada — Pero he de admitir que tú me causas algo inimaginable que nunca me sucedió con alguien más. Contigo sí que deseo esmerarme, esmerarme tanto como pueda para tan siquiera llegar a cautivarte un poco

BEAUTIFUL GANGSTER || KTH & JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora